El vicepresidente Guillermo Castillo fue delegado para acompañar la instalación de una mesa de diálogo entre Santa Catarina Ixtahuacán y Nahualá, en Sololá, por un conflicto histórico entre esas comunidades. Uno de los asesores de Gobierno para ese tema es Germán Arnoldo Noriega.
Por Gilberto Escobar
El 18 de agosto, el presidente Alejandro Giammattei y el vicepresidente Guillermo Castillo firmaron un acuerdo para la instalación de una mesa de diálogo y negociación entre los municipios de Santa Catarina Ixtahuacán y Nahualá, en el departamento de Sololá, que busca ponerle fin a una serie de problemas territoriales históricos, que cada año se incrementan y alcanzan mayores diferencias.
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En la mesa de diálogo mediarán y moderarán por el Gobierno: el vicepresidente Castillo; José Ángel López, ministro de agricultura, y Arnoldo Noriega, como asesor presidencial.
Noriega ha estado vinculado a la promoción de intereses de empresas hidroeléctricas en los últimos años y su trabajo ha estado enfocado en el impulso de procesos de diálogo, pero sin contar con la plena participación de las comunidades locales, como se ha consignado en varias publicaciones periodísticas.
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El acuerdo al que llegaron las comunidades de Sololá establece que las autoridades de Santa Catarina Ixtahuacán y Nahualá deben resolver, a través del diálogo y la negociación, la problemática que ha generado enfrentamientos violentos entre ellos. La mediación y moderación estarán a cargo de la delegación de alto nivel del Gobierno de Guatemala y se contará con la observación de monseñor Gonzalo de Villa, Arzobispo Metropolitano de la Archidiócesis de Guatemala, su función será “contribuir a garantizar la imparcialidad, la objetividad y la buena fe y actuación de todas las partes”; además de los párrocos de ambos municipios.
Los encargados de firmar el acuerdo fueron los alcaldes Manuel Guarchaj, de Nahualá; y Pascual Tambriz, de Santa Catarina Ixtahuacán; la Comisión de Títulos de Tierra y el vicepresidente Castillo.
La receta de Arnoldo Noriega
“Hoy se concluye la etapa preparatoria que consistió en escuchar a ambas partes, para buscar una solución pacífica a través de una serie de negociaciones”, fueron las declaraciones de Noriega durante la firma del acuerdo en los municipios de Sololá recogidas por la Agencia Guatemalteca de Noticias (AGN).
Entre las principales tareas, mencionadas por Noriega, son que la comisión del Gobierno elaborará un diagnóstico para la planificación de los futuros diálogos y para conocer la situación de pobreza y migración en esos municipios. Añadió que “el papel del Gobierno será de facilitación, moderación, mediación y acercamiento con las autoridades y la población”.
En enero de 2020, Noriega acompañó a una comitiva del Gobierno integrada por el presidente Giammattei, Silvia Valdés, presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ); y la fiscal general Consuelo Porras, jefa del Ministerio Publico (MP) para la implementación de una comisión de seguimiento al “Acuerdo para la Paz y el Desarrollo” de San Mateo Ixtatán, Huehuetenango.
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Sobre el “Acuerdo para la Paz y el Desarrollo”, que prometió trabajo, desarrollo y llevar a ese municipio al primer nivel de desarrollo local y nacional, solo quedaron promesas y decepciones para los habitantes, que ahora deben organizarse para poder rellenar los agujeros de gran tamaño que se encuentran en la carretera nacional que atraviesa el municipio.
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AYSSA y Noriega
Acuerdos y Soluciones, S.A. (AYSSA) es “una empresa guatemalteca de proyección internacional orientada a viabilizar proyectos de inversión en contextos de alta complejidad política, de conflictividad social y de fuerte presencia étnico-cultural”, según se describe en la página web.
Añaden que: “partimos de la realidad objetiva de que los proyectos de inversión no pueden ya realizarse solamente con los permisos tradicionales de ley, si no cuentan adicionalmente con la anuencia de las comunidades impactadas o de influencia. De manera irreversible, en la actualidad es necesaria la gestión de la licencia social que sólo las comunidades pueden otorgar, incluyendo los mecanismos de consulta a los pueblos indígenas derivados del Convenio 169 de la OIT”.
Arnoldo Noriega, su esposa Mildred Elizabeth López, junto a Pedro Muadi Menéndez fundaron la empresa consultora AYSSA. En marzo de este año fue nombrado como asesor presidencial en temas de conflictividad para el Gobierno de Alejandro Giammattei.
Sobre el socio de Noriega, Muadi Menéndez, fue presidente del Congreso de la República en el Gobierno de Otto Pérez Molina y el Partido Patriota; y condenado en marzo de este año a 30 años de prisión por lavado de dinero, asociación ilícita y peculado por sustracción, durante su gestión al frente del organismo Legislativo.
Muadi, también fundó la empresa FUNTEDEGUA, especializada en “tecnología para el desarrollo de Guatemala”, y dirigida por Noriega.
FUNTEDEGUA y AYSSA son empresas que conformaron el consorcio “paz, desarrollo y cultura”, fusionando el trabajo de ambas.
En su sitio web se promociona el eslogan: “el gana-gana para todos los actores locales”
