Créditos: Eslly Melgarejo
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Después de 23 años de carrera en el sistema de justicia y, a sus 56 años, Miguel Ángel Gálvez Aguilar, fue prácticamente obligado, por redes políticas y económicas criminales a salir del país y a presentar su renuncia al juzgado de mayor riesgo en el que envió a juicio a militares, políticos corruptos y a un presidente y exvicepresidenta por liderar una estructura criminal que defraudó al Estado.

Por Paolina Albani

Miguel Ángel Gálvez renunció a su cargo como juez de primera instancia penal, este 15 de noviembre y difundió la noticia en un video publicado en su cuenta personal de Twitter. Así puso fin a 23 años de carrera. Su nombre se suma a la lista de más de 24 operadores de justicia que han tenido que exiliarse como resultado de la persecución judicial y el acoso que han sufrido de parte de las redes político-económicas criminales, que fueron afectadas por los procesos penales que Gálvez llevó en su contra.

La noticia de la renuncia del juez era algo que ya muchos anticipaban. El clima mismo del sistema de justicia, que lo dejó a su suerte, a pesar de que trabajó ahí tantos años, fue una advertencia de lo que vendría. Y hasta ahora, esa silenciosa advertencia se ha cumplido a cabalidad.

Por eso, 10 días antes de su renuncia, Gálvez se subió a un avión con destino a Costa Rica con la intención de no regresar.

En su mensaje de despedida, Gálvez afirma que trató de transparentar los procesos que conoció y “prueba de eso es que la población le dio seguimiento a las audiencias y resoluciones dictadas por su servidor”.

También advirtió que “la independencia judicial está siendo manipulada y no se están garantizando los procesos como corresponde como las garantías constitucionales y el debido proceso. Durante el tiempo que he laborado, se ha cumplido con todas las garantías y quisiera hacerles de conocimiento que estaré a la expectativa de todo lo que está pasando en Guatemala”.

“No había entendido como lo entiendo ahora, que la justicia es cuestión de poder y no de control del poder”, añadió. Un mensaje que ha repetido para dejar ver la manipulación y la falta de independencia que existe en quienes controlan el sistema judicial.

Por último, animó a la población a que se organice para “que no les roben las posibilidades de justicia”.

La defensa continua

En una llamada breve, después del anuncio, a Gálvez se le escuchó tranquilo, pero con tono resignado y decaído. No quiso comentar demasiado sobre su estado emocional, solo dijo de forma derrotista: “Ya se concretó todo… Es toda una vida de 23 años y haber salido como salí pues…”.

Rápidamente, cambió el tema y refirió que ya estaría listo el informe de Roaldo Chávez, juez pesquisidor que investigó la solicitud de retiró de antejuicio, que le puso la Fundación Contra el Terrorismo, por supuesto abuso de autoridad, incumplimiento de deberes, prevaricato y detenciones ilegales, y que ya estaría en la Corte Suprema de Justicia (CSJ), pero este extremo todavía no ha sido confirmado.

Si fuera así, Chávez habría elaborado el informe en 10 días. Los mismos 10 días que el juez tiene haber dejado el país.

De momento se desconoce el contenido del documento en el que se haría la recomendación a la corte de retirar o no la inmunidad al juez de mayor riesgo, pero Gálvez no se ha mostrado optimista por un resultado favorable. Esto es parte de un proceso que muestra cómo la corte le ha cerrado toda posibilidad de defenderse.

Herbert Pérez, abogado de Gálvez, dijo que a pesar de que renunció a su cargo como juez, la defensa continuará trabajando y todavía falta que la CSJ acepte la renuncia.

Mañana, miércoles 16, la corte podría conocer tanto la renuncia como un permiso que su defensa solicitó el lunes 7 de noviembre, para obtener una licencia de cuatro meses sin goce de salario. Una petición que debió ser resuelta la semana pasada y que sería, otro recurso más, que la corte ha ignorado.

“Quienes tiene el poder de decisión no están jugando con reglas legales, están jugando con otro tipo de reglas. Cambiaron las reglas del juego a su antojo. Tenemos que desarrollar acciones para poder llevar una debida defensa con toda la normativa de la legalidad del caso”, fue el comentario de Pérez cuando se le consultó por la salida de Gálvez.

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