Por Amílcar Morales
En el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, las autoridades ancestrales del pueblo Ch’orti’, declararon persona no grata al diputado Boris España, del partido Todos, por ser uno de los diputados que aprobó el dictamen favorable a la iniciativa de ley 6076, que busca dar facultad a la policía y al Ejército, para el uso de la fuerza y de sus armas contra la población, y que podría aplicarse en plantones, manifestaciones, reuniones o concentraciones.
Boris España llegó al Congreso de la República por el distrito de Chiquimula y actualmente funge como presidente de la Comisión de Gobernación. El pasado 4 de agosto, presentó en una conferencia de prensa el dictamen favorable a esta iniciativa de ley, supuestamente, para el fortalecimiento de las fuerzas de seguridad pública y el ejército de Guatemala.
El diputado @borisespana10, presidente de la Comisión de Gobernación del Congreso, presentó en conferencia de prensa el dictamen favorable con modificaciones a la #Iniciativa6076, que propone una ley para el fortalecimiento de las fuerzas de seguridad pública y el @Ejercito_GT. pic.twitter.com/TgIvz0hshy
— Congreso Guatemala (@CongresoGuate) August 4, 2022
En esa ocasión, el diputado dijo que la sala legislativa estableció los criterios que la policía y el Ejército tienen para actuar, cómo utilizarán el armamento, qué acto tomar como agresión y cuáles son amenazas letales o pasivas, para que las fuerzas de seguridad cumplan con su función de protección a la población. No obstante, existe en un sector importante de la ciudadanía el rechazo total a esta iniciativa.
El rechazo contra la corrupción y el uso excesivo de la fuerza contra los pueblos originarios cuando defienden sus territorios ante la imposición de minerías sin consultas, fueron otras demandas de las autoridades del pueblo Ch’orti’ de la región oriente del país.
Gregorio Pérez, autoridad ancestral de ese pueblo, aseguró que salieron a las calles ante la ausencia del gobierno en sus municipios. Además, para manifestar su inconformidad por la crisis política que enfrenta Guatemala ante la inseguridad, la injusticia y la cooptación del Estado.
“Estamos en contra de la criminalización contra los pueblos, además rechazamos el alto costo de los productos de la canasta básica para el consumo diario, como el maíz, las verduras y los insumos agrícolas”, manifestó.
Lo que más nos preocupa, dijo, es la situación en la que se encuentra el país, que cada día se va convirtiendo en una dictadura como Nicaragua, ante ello exigieron al gobierno de Alejandro Giammattei el respeto a la independencia de las instituciones.
Por su parte, donde Serapio Oloroso, de 75 años, y originario de la comunidad de Shupa, del municipio de Camotán dijo que “ningún gobierno, ningún alcalde y ningún gobernador los ha escuchado. Durante los 75 años que tengo de vivir aquí no hemos tenido respuestas de las supuestas autoridades”, recordó. Además, agregó que a su edad nunca había visto que las autoridades reprimieran tanto a los manifestantes en su territorio.
El punto de Vado Hondo no se cerró por completo, los vehículos circularon sin inconvenientes, sin embargo, cuatro radiopatrullas de la Policía Nacional Civil (PNC) estuvieron vigilando a los manifestantes. A pesar de eso, las acciones de protesta continuaron y finalizó a las 2 de la tarde.
