Por Francisco Simón Francisco
Este 7 de julio, 600 agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) llegaron al municipio de Santa Cruz Barillas, situado en la región norte de Huehuetenango, a petición de la empresa eléctrica Energuate, con el respaldo de la municipalidad de ese lugar.
Según la empresa, la presencia de la PNC fue solicitada, supuestamente para brindar seguridad a sus trabajadores, mientras realizan la reconexión de la luz eléctrica en la zona urbana de Barillas, que ellos mismos desconectaron el pasado 26 de junio, sin causa alguna.
Además, con el respaldo de la fuerza pública buscan reestablecer este servicio en más de 75 comunidades de ese municipio, que se quedaron sin luz desde abril. Sin embargo, algunos pobladores cuestionan el actuar inapropiado de la empresa Energuate por tres razones: de abril a junio la población siguió pagando este servicio, a pesar de no poder utilizarlo. Otra razón que indican es el elevado costo del consumo que viene en las facturas, además destacan el uso excesivo e innecesario de la seguridad pública para instalar un servicio privado.
En una reunión realizada en la Gobernación Departamental de Huehuetenango, el pasado 22 de junio, el representante de Energuate habló de manera discriminatoria contra la población de origen maya Q´anjob´al de Santa Cruz Barillas. Aseguró que la gente de ese municipio “es conflictiva y pone en riesgo la vida de los trabajadores de la empresa”, por lo tanto, solicitó la presencia de la PNC, según él porque es necesaria la seguridad para ingresar al lugar.
Los representantes de las comunidades presentes en esa reunión, cuestionaron el alto costo de la energía, pero el delegado de la empresa no reconoció esa realidad. Según las versiones comunitarias, el costo de la energía se incrementó un 7% en abril a comparación de marzo del mismo año. Las personas que pagaban Q.125.00 al mes, llegaron a pagar Q.175.00 en abril.
Mientras tanto, en la última reunión realizada en Huehuetenango el 5 de julio, el alcalde municipal Gilberto Francisco, más conocido como Neco, sin consultar a los representantes avaló la petición de la empresa, sobre la llegada de los agentes de la PNC al municipio.
Alto costo de la energía fue la razón de rechazo
El pasado 21 de junio, más de 4 mil 500 personas de 75 comunidades, que se habían quedado sin luz eléctrica desde abril, se concentraron frente a la municipalidad de Barillas y solicitaron la reconexión de la energía, sin la presencia de la PNC.
Ese día, una multitud conformada por mujeres y hombres, acompañaron a sus autoridades locales. La concentración inició en la antigua pista de aterrizaje; luego caminaron desde ese punto y pasaron frente a las instituciones del Ministerio Público (MP), el Juzgado de Paz, PNC y finalmente llegaron al parque central del municipio.
Durante la marcha recordaron a las autoridades, que el alto costo de la energía fue una de las razones de su oposición hacia Energuate. Mencionaron el aumento de los costos de la energía eléctrica, mientras, quienes trabajan en el campo, perciben un salario por jornal al día, que está entre 40 y 50 quetzales, aseguraron.
“Es difícil para nosotros asumir los costos cuando no tenemos mejores ingresos”, dijo Juan Pedro Juan, originario de la comunidad de Tres Ranchos, a quien le cobraron 310 quetzales por el servicio en abril.
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