Ixcán: A 15 años de la consulta de buena fe, la decisión de las comunidades se mantiene vigente

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Créditos: Movimiento Social Intercultural de Ixcán
Tiempo de lectura: 4 minutos

 

“…cuando se realizó la consulta no había ningún megaproyecto en el municipio, pero la consulta era específicamente sobre la hidroeléctrica Xalalá y la exploración y explotación petrolera”.  Ambos proyectos siguen vigentes para el Estado. En 2020 el Estado dijo que “el proyecto Hidroeléctrico Xalalá va porque va”.

Por Elías Oxom

Las comunidades de Ixcán, Quiche, celebraron este 21 de abril, los 15 años de la Consulta Comunitaria de Buena Fe, en la que 164 comunidades de las 7 microrregiones del municipio, expresaron su rechazo a la construcción de la hidroeléctrica Xalalá y la exploración y explotación petrolera.

En las actividades de conmemoración, realizadas en el salón número II del municipio, participaron representantes de organizaciones comunales que compartieron su experiencia en consultas similares, como el caso de la consulta comunitaria de Buena Fe, del pueblo Q’eqchi’ de Santa María Cahabón Alta Verapaz. También compartieron su experiencia dirigentes de Izabal y Huehuetenango.

La Consulta Comunitaria de Buena Fe en Ixcán, se realizó el 20 de abril de 2007.  De las 21 mil 155 personas que participaron, el 89.7% votó en contra de la implementación de megaproyectos en su territorio, participaron 164 comunidades de las 7 microrregiones del municipio.

Para Herbert Sandoval, del Movimiento Social Intercultural del Ixcán, la consulta es una reivindicación de los derechos de la autodeterminación de las comunidades del Ixcán, que dieron su posicionamiento sobre la implementación del extractivismo en su territorio.

En la microrregión V del municipio el tema de la consulta fue complicado, anotó, muchas comunidades se negaban a realizarla. Algunos empresarios estaban de acuerdo con la hidroeléctrica y votaron a favor del proyecto, “porque sí que tenían intereses económicos por encima del tema ambiental”.

Sandoval recordó que cuando se realizó la consulta no había ningún megaproyecto en el municipio, pero la consulta era específicamente sobre la hidroeléctrica Xalalá y la exploración y explotación petrolera. Ambos proyectos, dijo, siguen vigentes para el Estado, en 2020 cuando el gobierno de Giammattei realizó el Plan de Expansión para la Generación de Energía Eléctrica retomaron Xalalá, según el Estado “el proyecto Hidroeléctrico Xalalá va porque va”.

Foto: Movimiento Social Intercultural de Ixcán

Además, dijo que los resultados de la consulta siguen vigentes, son legítimos y legales. “Son vigentes porque no tiene caducidad; es legal porque la consulta se realizó en el marco de lo que establece el Convenio 169 de la OIT de los Pueblos Indígenas y Tribales, específicamente de la consulta con consentimiento previo, libre e informad. Y es legítimo porque se respetó la voz de las comunidades, porque se escuchó la palabra de las abuelas, de los abuelos, de las señoras, de los señores y de los niños mayores de 7 años que participaron en la consulta”, indicó Sandoval.

Después de la consulta se realizaron varias acciones de seguimiento, entre ellas la creación del Movimiento Social Intercultural del Ixcán y de la Asociación de Comunidades para el Desarrollo, Defensa de la Tierra y los Recursos Naturales (ACODET). Además, se han realizado otras acciones legales para frenar de alguna manera la imposición de esos megaproyectos.

Antecedentes

La Consulta de Buena Fe se organizó ante la construcción del proyecto hidroeléctrico Xalalá, que pretenden construir en el territorio y que afectaría directamente al municipio, después de que en 2007 el gobierno del presidente Óscar Berger realizará los estudios de factibilidad geológica para la hidroeléctrica, que tendría un potencial de 181MW y se convertiría en la hidroeléctrica más grande de Guatemala, solo después de Chixoy.

Fue organizada por las autoridades comunitarias. Ellas definieron los procedimientos de acuerdo a las formas, usos y costumbres de cada comunidad; fue respaldada por diferentes organizaciones sociales; la municipalidad del Ixcán reconoció los resultados de la consulta.

El desarrollo de la consulta empezó en febrero de 2007, con procesos de formación a personas que se convirtieron en los promotores, para informar a las comunidades sobre los daños que podía llegar a ocasionar la hidroeléctrica.

Al mismo tiempo, el Comité Comunitario de Desarrollo (COCODE) de II Nivel, de las 7 microrregiones solicitó al consejo municipal un Acuerdo Municipal para la realización de la Consulta Comunitaria de Buena Fe; dicha solicitud fue aprobada a través de un Acuerdo Municipal.

La consulta se llevó a cabo el 20 de abril de 2007, de manera simultánea en todas las comunidades; en la cabecera municipal se organizó un equipo digitador que se encargó de recibir las actas y contabilizar los votos y presentarlos, para que fueran reconocidos por el concejo municipal de ese momento.

Las maneras de votación fueron distintas; en algunas comunidades se utilizaron papeletas que tenían las dos opciones de respuestas: SÍ o No, en varias comunidades decidieron hacerlo a mano alzada. En la consulta participó niñez, de 7 años en adelante, la juventud, personas adultas y personas de la tercera edad.

De las 21 mil 155 personas que participaron en la consulta, 18 mil 982 votaron por el No a la implementación de megaproyectos en su territorio; mientras que 1 mil 829 pobladores dijeron SI; y 400 personas aproximadamente votaron de forma neutral.

El 21 de abril, el alcalde municipal, Marcos Ramírez Vargas, ofreció una conferencia de prensa para dar a conocer públicamente los resultados de la consulta. En ella informó que los resultados serían entregados al Congreso de la República, el Ministerio de Energía y Minas, el INDE, la Procuraduría de los Derechos Humanos. “Los resultados de esta consulta no se discuten, no se analiza, serán entregado para que se respeten”, indicó en su momento.

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