El Cuarto de las Ausencias reabre sus puertas; una oportunidad para reavivar la memoria de los y las desaparecidas

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Créditos: Casa de la memoria.
Tiempo de lectura: 4 minutos

Por Juan Calles

En el cuarto de las Ausencias se puede interactuar con los objetos que pertenecieron a las personas desaparecidas, “Es un memorial vivo”.

El crimen de desaparición forzada persiste en el tiempo. Para las familias que tienen un familiar desaparecido el dolor y la tristeza no prescribe, no se acaba, todos los días las madres esperan ver llegar a su hijo, a su hija, los niños y niñas que perdieron a sus padres guardan la esperanza de saber algo de ellos, la desaparición forzada es un crimen que se comete contra una persona, pero que lo sufre toda una familia.

En el memorial “El Cuarto de las Ausencias” se posibilita recorrer la historia de las personas que fueron desaparecidas durante las dictaduras y la guerra sucia en Guatemala. El Cuarto de las Ausencias permite entrar al espacio íntimo para conocer como vivían, cuales eran sus pasatiempos favoritos, nos deja acercarnos al ser humano.

Este 11 de marzo se inaugura en Casa de la Memoria este espacio, en el que se tendrá acceso libre y gratuito a objetos y pertenencias del niño Marco Antonio Molina Theissen, del escritor Luis de Lión y del estudiante Félix Estrada Mejía, desaparecidos por el Estado de Guatemala.

Salomón Estrada Mejía, hermano de Félix, quien está a cargo del memorial se muestra orgulloso al mostrar el libro de ajedrez con el que su hermano se entretenía. “Yo me siento muy feliz de poder contarle a la gente como era mi hermano, pero también hablar de la desaparición forzada y del dolor que causa, pero para que esas cosas no se vuelvan a repetir”, menciona Salomón.

Mientras acomoda fotografías y objetos, recuerda cómo jugaba con su hermano, cómo era su sentido del humor y que era aficionado al ejercicio, “Corría hasta el aeropuerto por que le gustaban los aviones”, rememora. Salomón opina que mantener viva la memoria de los desaparecidos es importante para que la gente pierda el miedo. “Hemos tenido experiencias en las que personas que visitan el Cuarto de las Ausencias nunca habían hablado de que tenían un familiar desparecido, pero al venir y ver la exposición pierden el miedo y hablan de su familiar desaparecido”.

La memoria un territorio en disputa 

Para el director de la Liga de Higiene Mental, Marco Antonio Garavito, el recuerdo a través de la memoria histórica permite comprender el pasado y motivar a que las nuevas generaciones entiendan por qué sucedieron los hechos y cómo sucedieron, nos permite comprender el presente y darle sentido a la vida actual y entender por qué somos como somos.

“Yo creo que en Guatemala hay dos hechos que se pueden definir como “acontecimientos” que cambiaron la vida de todos para siempre, la conquista en 1492 y el conflicto armado interno, “es decir, nosotros estamos signados en la actualidad, en el presente por esos hechos y eso le da sentido a lo actual”, subrayó.

Según Garavito el Estado guatemalteco intencionalmente ha procurado que no se conozca la memoria histórica, para evitar que se hable, que se discuta, que nos proyectemos como sociedad y así evitar la repetición de hechos negativos para la sociedad.

“Por eso son importantes los sitios testimoniales vivos, por ejemplo, que exista algo que nos recuerde lo que le pasó a alguien en algún momento de la historia, si por cada desaparecido hubiera plaquetas en el centro histórico, estuviera lleno de memoriales ese centro”, anotó.

En el cuarto de las ausencias se puede interactuar con los objetos que pertenecieron a las personas desaparecidas, “Es un memorial vivo” opina Garavito, al asegurar que en Guatemala hacen falta más memoriales como el Cuarto de las Ausencias. “Nos hace falta en Guatemala espacios para las practicas de la memoria, porque un pueblo sin memoria no sana, un pueblo sin memoria no le permite identificar la verdad y alcanzar la justicia.”

Según Salomón Estrada, mantener viva la memoria de su hermano es doloroso pero necesario. “Si, se mantiene vivo el dolor por tu familiar desaparecido, pero cuando vemos que estos espacios se llenan de gente, que quiere saber qué pasó, en especial las nuevas generaciones, entonces vemos que es necesario, que es bueno tener viva la memoria”.

El Cuarto de las Ausencias ha abierto sus puertas desde el año 2015 y ha encontrado sede en diferentes espacios a lo largo de estos años; en la fundación Yaxs, en la Ciudad de la Imaginación, en Quetzaltenango y en el museo de la antigua estación del Ferrocarril, hasta que por motivo de la pandemia de COVID19 cerró por dos años.

Este 11 de marzo se inaugura una vez más el memorial, en donde se podrán observar fotografías familiares de personas desaparecidas durante el conflicto armado interno, además de interactuar con el libro de ajedrez de Félix Mejía, con los juguetes favoritos de Marco Antonio Molina Theissen y el suéter favorito del escritor Luis de Lión.

El cuarto de las ausencias estará abierto al publico en la casa de la memoria “Kaji Tulam”, ubicada en la 6ta avenida 1-73 zona 1 a partir del 11 de marzo a las 16:00 horas hasta el 11 de junio del presente año.

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