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El ex jefe de la FECI, Juan Francisco Sandoval, respondió a las acusaciones en su contra tras revelarse un testimonio en una causa judicial que acusa al presidente Alejandro Giammattei de recibir sobornos para financiar su campaña electoral: “El MP debiera investigar la corrupción y no atacarme”. El ex fiscal se solidarizó con la jueza Aifán, la fiscal Sosa y los ex trabajadores de la CICIG y afirmó: “La institucionalidad está totalmente destruida”. Sandoval dijo que no le cabe “la menor duda” que la persecución en su contra y la de Aifán es para proteger a Giammattei. “El MP se ha instrumentalizado para cometer actos graves de corrupción”, aseveró.

Por Prensa Comunitaria

En entrevista concedida a Prensa Comunitaria, el ex jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Juan Francisco Sandoval, dio su posición sobre la importancia de las relevaciones en la investigación de El Faro, de la existencia de un audio de un testigo, en una causa judicial, que acusa al presidente Alejandro Giammattei de recibir financiamiento ilícito por 20 millones de quetzales para su campaña electoral.

Sandoval que fue acusado en medios afines al gobierno y net center, rechazó los señalamientos en su contra, a los que calificó de “calumnias” y reclamó que “el “Ministerio Público debiera de investigar los graves actos de corrupción y lo que está haciendo en este momento es nuevamente atacarme”.

Sandoval no duda en señalar que la revelación sobre el audio de este testigo arroja luz sobre los verdaderos motivos de su destitución y de la persecución contra otros operadores de justicia, en especial la jueza de Mayor Riesgo, Erika Aifán. Ante la pregunta de si es correcto decir que su remoción y otras acciones, como la persecución reciente a la jueza Aifán, están encaminadas a proteger al presidente Giammattei, respondió: “Sí. A mí no me cabe la menor duda que eso es lo que ha ocurrido”.

El ex jefe de la FECI dijo que no puede opinar sobre las afirmaciones del testigo reveladas por El Faro, “entiendo que es un caso en reserva”, explicó. Sin embargo, recordó que “respecto a lo que pude investigar, lo manifesté en la conferencia de prensa del 23 de julio: uno de los temores por mi vida y una de las justificaciones que existían para que yo saliera del país era el tema de que existía información que podía involucrar a gente cercana al gobierno con el hallazgo de dinero en la Antigua Guatemala”. En referencia a las maletas con 122 millones de quetzales que fueron incautadas en Antigua en una casa alquilada por el ex ministro de Comunicaciones, José Luis Benito, señalado por el testigo como el operador que consiguió el dinero para Giammattei.

Sandoval cuestionó las contradicciones del gobierno y en especial del Ministerio Público, ya que en lugar de investigar si existen los hechos de corrupción denunciados, habla de filtraciones y lo ataca. Destacó que por un lado Presidencia dijo que no hay ningún caso que involucre a Giammattei y por otro, el ahora jefe de la FECI, Rafael Curruchiche, denunció filtraciones de un caso en reserva, que “entonces sí existe”. “Luego, resulta que, no existe la investigación y existe el testigo, si existe un audio y un testigo que desacredita lo que en su momento fue declarado ante juez competente”, destacó.

El ex fiscal expresó su rechazo a lo que están enfrentando la jueza Erika Aifán y la fiscal Siomara Sosa, que, destacó, solo han realizado su trabajo y cumplido con su deber. En el mismo sentido condenó la persecución contra los ex trabajadores y trabajadoras de la CICIG.

Sandoval dijo que por su trabajo siempre asumió riesgos, pero señaló que “el riesgo se acrecentó cuando asumió Consuelo Porras como Fiscal General; porque sabíamos que no gozábamos del respaldo, de la protección, para desempeñar con independencia nuestro trabajo. Porque la Fiscal General no era aliada de la lucha contra la corrupción”.

En un duro cuestionamiento al MP y a la gestión de Porras afirmó que: “Se ha instrumentalizado para cometer esos actos graves de corrupción, existe un ensañamiento en contra de todo aquel operador de justicia o integrante de la sociedad que señale esos hechos”.

Para Sandoval “la institucionalidad está totalmente destruida” y “es la ciudadanía la que tiene la responsabilidad” de encabezar un cambio.

Lo que sigue es un resumen de la conversación de Sandoval con Prensa Comunitaria, espacio que especialmente agradeció, porque, según dijo “hoy he sido objeto de múltiples ataques que han sido transmitidos y replicados, por ejemplo, en la televisión abierta. No me han consultado, ni siquiera han pedido mi opinión con respecto a la serie de calumnias que ellos están proyectando”.

El diario digital salvadoreño El Faro develó ayer la existencia de un audio con un testigo reservado en una investigación que señala al presidente Giammattei de haber recibido 20 millones de quetzales de empresas constructoras para financiar su campaña electoral a cambio de adjudicaciones de obra púbica. ¿Hasta dónde llegó la investigación de la FECI en este caso?

Entiendo que la investigación en este momento se encuentra en reserva. Por ende, lo único que le puedo decir es que el medio de comunicación ha publicado información que obtuvo de alguna de sus fuentes. Me llama la atención la manera en que el Ministerio Público ha realizado comunicación en relación con el caso. Lo importante es que el Ministerio Público establezca, en primer lugar, si existe el hecho de corrupción; lo otra cuestión, es oportuno que se establezca cómo ocurren esas filtraciones que ponen en riesgo las investigaciones y la vida de las personas. Es una actitud recurrente. En este Ministerio Público vimos el caso de una testigo de nombre Velin Vega, donde conocimos que había filtración de información desde el despacho de la fiscal general. Tengo ocho meses de estar fuera de la fiscalía, por lo que no podría mencionar más al respecto. Porque entiendo que existe una investigación en relación al tema.

Ahora bien, respecto a lo que pude investigar, lo manifesté en la conferencia de prensa del 23 de julio: uno de los temores por mi vida y una de las justificaciones que existían para que yo saliera del país era el tema de que existía información que podía involucrar a gente cercana al gobierno con el hallazgo de dinero en la Antigua Guatemala.

Otra situación que es importante resaltar es que el hallazgo fue de tal envergadura que se acercaron personas, consta en actas y audios, hasta se tomó la declaración, y en esas declaraciones que se brindaron se cumplió con el ritual.

¿Cómo le llegó el audio a usted y a la FECI?

Esa información se dio en un órgano jurisdiccional. Yo no obtuve el audio. Entiendo que la persona declaró en el juzgado.

¿Cómo y cuándo se dio cuenta que esta investigación lo ponía en peligro?

Lo podemos ver hoy día, en la articulación, tanto del gobierno, como de los medios de comunicación que replican las noticias gubernamentales y un Ministerio Público que debiera de investigar los graves actos de corrupción y lo que se está haciendo en este momento es nuevamente atacarme.

La verdad es que por el tipo de trabajo, siempre en el Ministerio Público es un trabajo de riesgo. En el caso del trabajo que desarrollábamos en la Fiscalía el riesgo se acrecentaba, porque las investigaciones estaban dirigidas contra gente de alto perfil y gente con poder. El riesgo se acrecentó cuando asumió Consuelo Porras como Fiscal General; porque sabíamos que no gozábamos del respaldo, de la protección, para desempeñar con independencia nuestro trabajo. Porque la Fiscal General no era aliada de la lucha contra la corrupción, sino, por el contrario, la alineación estaba con los actores a los que debía de proteger.

¿Qué presiones recibió de la Fiscal?

Lo he denunciado públicamente, de la cantidad de veces que recibía instrucciones para que acelerara la persecución contra determinado actor, de la misma manera para detener alguna investigación. En otros casos, las causas eran trasladadas hacía otras fiscalías, para que no continuáramos con el desarrollo de las mismas.

Estas es la segunda investigación que apunta a Giammattei recibiendo dinero sucio, la primera fue la de la alfombra con dinero de empresarios rusos vinculados a una mina en El Estor, ¿Qué papel cree que jugaron estas investigaciones en su destitución?

Como lo reitero, lo denuncié en el momento de mi salida. Y usted ha visto cuáles han sido las reacciones virulentas que ha habido de parte del gobierno. De hecho, los ataques en mi contra, se potencializaron a raíz de que fueron citados determinados testigos a la sede de la Fiscalía. Y si hago un recuento cronológico: los meses de mayo, junio y julio, de 2021 fueron meses muy complicados, demasiado complicados, debido a que estábamos haciendo nuestro trabajo. Lo que hoy están viviendo los compañeros, los que están en Guatemala, es una situación muy complicada. Duele ver, como lo decía hoy, a la fiscal Siomara Sosa, quien fue detenida, que lo único que hizo fue realizar su trabajo y que por eso estaba siendo objeto de persecución.

¿Desde cuándo empezó a advertir que la fiscal iba a tomarse la FECI?

Desde antes que llegara. Las manifestaciones que hacía públicamente, denotaban que la actitud era de cuestionar el trabajo que desarrollábamos en la FECI, lo fui confirmando conforme fui avanzando en el trabajo en la Fiscalía bajo la administración de ella.

¿Sospechaba que iban a sustituirlo por el fiscal Curruchiche?

No. La verdad es que en un primer momento no supe qué directrices iba a tomar la Fiscal General. Lo que puedo advertir de lo que ocurrió fue que la fiscal que me sustituyó inmediatamente, Karla Valenzuela, no se prestó a recibir instrucciones que fueran de carácter ilegal. También lo que se puede advertir es que el fiscal Curruchiche cuando lo nombran ya tenía una idea de que situaciones como las de hoy están acaeciendo en mi contra y en contra del personal que trabajamos en la FECI y acompañados por la CICIG esa iba a ser la dinámica.

En resumen, ¿es correcto decir que su remoción y otras acciones, como la persecución reciente a la jueza Aifán, están encaminadas a proteger al presidente Giammattei?

Sí. A mí no me cabe la menor duda que eso es lo que ha ocurrido.

Si es así, ¿entonces el MP se ha convertido en una tapadera de la corrupción en Guatemala?

Se ha instrumentalizado para cometer esos actos graves de corrupción, existe un ensañamiento en contra de todo aquel operador de justicia o integrante de la sociedad que señale esos hechos.

Repercusiones para juezas y jueces y extrabajadores de CICIG

¿Qué relevancia tiene esta investigación en la persecución y criminalización contra la jueza Erika Aifán?

Lo que se puede observar es que parte de las acciones que se han instaurado en contra de Erika Aifán pueden tener como génesis el control que realiza ella en las investigaciones que involucran a personal del Ejecutivo, magistrados de la Corte Suprema de Justicia y que en virtud de la manera en que ella ha desempeñado su cargo como juzgadora, les resulta incómoda. Así como yo era incómodo en el ejercicio del puesto de fiscal del Ministerio Público. Ahora lo importante es sacarse del camino a una persona como ella.

¿Cuál es el peligro real que enfrentan quienes trabajaron en la CICIG?

Además de lo que se está viviendo con el tema de la criminalización, ellos han superado esa etapa post CICIG bajo un ambiente de estigma. Ha sido muy complicado para ellos lograr seguir desempeñándose profesionalmente, debido a que existe prácticamente un veto de parte de la iniciativa privada y del gobierno a contratar a personal que haya pertenecido a dicha comisión.

Ataque mediáticos y contradicciones del gobierno

Desde el lunes mismo, varios medios, en particular los canales de televisión, intentaron desacreditar la investigación de El Faro, presentaron otro audio, de otro testigo, diciendo que es el Testigo A, mencionado por El Faro y lo acusan a usted de obligar a ese testigo a mentir. ¿Es el mismo audio y el mismo testigo? ¿Qué responde a esas acusaciones?

Primero, no soy experto en audios. En segundo lugar, imagínese qué superpoderes tendría que tener para ayudar a que una persona se sustraiga de varios sistemas judiciales, si es que dicen que existen acusaciones, si es que yo me comprometí a asumir alguna actitud para favorecer… Entonces, es una situación que no sé cuál es el atrevimiento para realizarla, porque en el caso de esa persona, que no me consta si él lo ha declarado, sino únicamente fue lo que publicó un medio de comunicación que dice que es una investigación en reserva. Pero en las declaraciones se cumplía con todos los rituales que establece la ley. Entonces, la verdad ataja a los escándalos.

Esta reacción únicamente busca desacreditarme. Pero, existen una serie de contradicciones entre lo que ha reportado el gobierno y lo que ha reportado la Fiscalía. Vea usted, como, por una parte, se dice que no existe alguna investigación relacionada con la administración gubernamental, pero si se abre una investigación porque se filtró el audio de una declaración que supuestamente si existe. Pero luego, resulta que, no existe la investigación y existe el testigo, si existe un audio y un testigo que desacredita lo que en su momento fue declarado ante juez competente.

El fiscal Rafael Curruchiche dijo hoy a a medios de comunicación, que han presentado una denuncia sobre la filtración de un audio y la declaración de un testigo en un caso bajo reserva; también el gobierno afirmó, por medio de su secretario de comunicación, que todo es parte de una “agenda ideológica” de “enemigos de la democracia”: ¿Qué opinión le merecen estos señalamientos?

Que si tienen elementos que acrediten sus dichos, supongo que por eso hacen ese tipo de afirmaciones.

En uno de los últimos mensajes que dio, hizo un llamado a la población a movilizarse: ¿Por qué es importante que la ciudadanía se movilice?

Porque se puede confirmar y apreciar que la institucionalidad está totalmente destruida y que es la única manera de cambiar la situación de grave deterioro que están teniendo las instituciones en Guatemala, es la ciudadanía la que tiene la responsabilidad en sus manos en la actual situación que afronta el país.

¿Un comentario final?

Agradecer el espacio, porque como vemos los grandes medios de comunicación únicamente tienen una versión de los hechos. Hoy he sido objeto de múltiples ataques que han sido transmitidos y replicados, por ejemplo, en la televisión abierta. No me han consultado, ni siquiera han pedido mi opinión con respecto a la serie de calumnias que ellos están proyectando. Es lógico que transmitan ese tipo de noticias, porque las investigaciones en su momento establecieron como ellos formaban parte de ese entramado sistémico de cooptación estatal.

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