Por APG
La Comisión de Libertad de Prensa de la Asociación de Periodistas de Guatemala APG deplora la actitud intolerante y opaca de la nueva presidenta del Congreso de la República, Shirley Rivera, hacia reporteros y medios de comunicación, a quienes advirtió que únicamente brindará declaraciones dos días a la semana, en un espacio específico. Esta acción vulnera la libertad de expresión de la prensa y ciudadanía, y evidencia el escozor de la congresista hacia la fiscalización de los medios.
A inicios de esta semana, comunicación social de ese organismo informó a los periodistas que Rivera únicamente responderá a sus consultas si envían las preguntas por escrito y por adelantado, de lo contrario, no serán atendidos. Este miércoles, en conferencia de prensa, la congresista indicó que atenderá a los reporteros solo los lunes y jueves.
Rivera, perteneciente al partido oficial y con estrechos vínculos con el presidente Alejandro Giammattei, de forma burda argumentó que esta decisión la toma para establecer un “orden” en sus agendas y aseguró que lo hace porque antes de asumir la presidencia se “enfocaba en trabajar y dar resultados”, aunque dichos resultados son desconocidos públicamente.
La presidenta del Congreso, replicando acciones de sus antecesores, Allan Rodríguez y Álvaro Arzú Escobar, pretende censurar a los periodistas para que no accedan a declaraciones o información, de importancia pública, que se genera en el Legislativo. El primordial interés de Rivera es amordazar y ocultar información a los medios sobre importantes procesos en los que se involucrará o tendrá responsabilidad el Congreso, como las elecciones del nuevo Procurador de los Derechos Humanos, el Fiscal General y el Contralor General de Cuentas.
Esta mecánica de “orden” impuesta por Rivera provocará que los cuestionamientos de periodistas sean depurados y únicamente reluzcan los formulados por medios o reporteros complacientes con las autoridades. Las conferencias, como una parte del proceso de fiscalización de la prensa, se convertirán en una pantomima para la elevar la imagen de Rivera, los miembros de la directiva y diputados allegados.
Es pertinente recordar además que la directora de comunicación social de ese organismo, Joselyn Mérida, desde que asumió el puesto ha tomado diversas acciones para limitar el ejercicio periodístico y ha buscado mediante otras limitar la libertad de expresión, al extremo de criminalizar a periodistas.
La APG y su Comisión de Libertad de Prensa recuerdan a Rivera que como funcionaria es su obligación informar diligentemente a los medios y ciudadanía sobre las acciones, resultados y labor que realiza el Congreso, y no solo cuando ella arbitrariamente lo disponga. Destaca además que los funcionarios “están sujetos a un mayor escrutinio por parte de la sociedad”, de acuerdo al Principio 11 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la CIDH.
Guatemala, 20 de enero de 2022
Comisión de Libertad de Prensa -APG-
