Eric Olson: “La idea de las fuerzas de tarea de EE. UU. es perseguir a personas que han violentado el Estado de derecho”

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Créditos: La vicepresidenta de EE.UU. Kamala Harris se reunió con el presidente Alejandro Giammattei, en junio pasado. Foto Gobierno
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“Dinero robado por los corruptos es dinero que no llega a beneficiar a los más necesitados. Son los pobres y necesitados que han tomado la decisión de migrar precisamente porque el Estado, sea guatemalteco, hondureño, salvadoreño o haitiano no resuelve sus necesidades”, Eric Olson

Por Regina Pérez

Prensa Comunitaria conversó con Eric Olson, director de Políticas e Iniciativas Estratégicas de la Seattle International Foundation (SIF) y una de las personas que se ha reunido con la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, para hablar de Centroamérica. Olson elaboró una lectura sobre las fuerzas de tarea que Washington ha creado para ayudar a combatir la corrupción en la región, uno de cuyos objetivos es, dijo, recoger información para ayudar a fiscales estadounidenses a presentar casos ante los tribunales estadounidenses.

De acuerdo con Olson, aunque Estados Unidos no puede presentar casos en Guatemala, Honduras y El Salvador contra personas corruptas, sí pueden ser llevadas a tribunales en el país norteamericano, con lo cual puede haber sanciones, no solo de visas sino de cuentas bancarias, capacidad de inversión y comercio con Estados Unidos.

Por otro lado, el experto de la SIF señaló que la razón por la que Estados Unidos decidió operar la fuerza anticorrupción sin colaborar con las fiscalías de estos tres países se debe a la pérdida de confianza y a las decisiones que han tomado los gobiernos. En Guatemala, la fiscal general, Consuelo Porras, despidió al fiscal Juan Francisco Sandoval como jefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad, en julio pasado, lo que creó esa falta de confianza.

Antes de su visita a Guatemala, en junio pasado, la vicepresidenta Kamala Harris se reunió con líderes del sector filantrópico internacional, entre ellos Olson, para discutir sobre las causas de migración en los países del Triángulo Norte. Después de esa reunión y durante su visita en Guatemala, Harris anunció la creación de una fuerza anticorrupción regional, uno de los resultados tangibles de esa reunión. Esta fuerza tendría entre sus funciones apoyar a fiscales guatemaltecos, de Honduras y El Salvador, a seguir la ruta del dinero.

En abril pasado, Olson y otros líderes del sector filantrópico internacional se reunieron con la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, antes de su visita en Guatemala. Foto SIF

Tres meses después, el medio elPeriódico dio a conocer que Estados Unidos ha decidido operar dicha fuerza anticorrupción sin tomar en cuenta a los gobiernos de Centroamérica. Lo que sucederá, de acuerdo con Olson, es que no trabajarán con las Fiscalías de los países del Triángulo Norte y que Guatemala sí va a ser tomada en cuenta, solo que no con la fiscal general Porras.

 

PC: ¿Cuál es la principal razón por la que Estados Unidos excluye a Guatemala de la fuerza anticorrupción cuando en un momento la vicepresidenta Kamala Harris habló de la creación de una Fuerza Anticorrupción regional?

Eric Olson: Para hacer ese tipo de trabajo hay que tener confianza. Son temas muy delicados, son casos jurídicos bastante complicados, hay que tener una confianza. Y había confianza con el fiscal Juan Francisco Sandoval, ella lo dijo, ha sido algo bastante claro de parte de Estados Unidos. Pero Guatemala tomó la decisión y la fiscal tomó la decisión de, no solo despedir al fiscal Sandoval sino perseguirlo jurídicamente. Eso ha creado circunstancias, desde el Departamento de Estado, el canciller mismo dijo “hemos perdido confianza en la Fiscal” y de hecho ya la han sancionado por sus acciones antidemocráticas que violentan el Estado de Derecho. Así que no es posible tener una relación de confianza por un lado, por otro lado sancionarla por estas acciones. Pero va a seguir el trabajo de la fuerza anticorrupción, van a seguir lo que están haciendo pero ahora con más dificultad en la colaboración con la Fiscalía de Guatemala.

PC: ¿Hacia quienes dirigirá sus investigaciones en Centroamérica esta fuerza anticorrupción?

Eric Olson: Yo no tengo nombres de personas pero serían personas que de alguna manera hay información que indique que posiblemente hayan incurrido en algunas acciones de corrupción y malversación de fondos y violentado el Estado de Derecho. Esa es la idea, perseguir a estas personas jurídicamente.

PC: ¿Qué mensaje envía la administración estadounidense, tras incluir a la fiscal general Consuelo Porras en la lista Engel, y ahora echando a andar la fuerza anticorrupción sin tomar en cuenta a Guatemala?

Eric Olson: No es que no esté tomando en cuenta a Guatemala, si la van a tomar en cuenta, solo que no con la Fiscal, pero yo creo que ese es el punto que hay que tener claro. La señal es que para hacer ese trabajo de forma seria hay que tener socios y contrapartes confiables y en este caso no las hay. Por esa razón yo creo que ellos han tomado la decisión de seguir adelante pero ya no con la participación directa de la Fiscalía.

PC: La desconfianza de EEUU contra Consuelo Porras ¿también existe hacia fiscales de El Salvador y Honduras y por eso no fueron tomados en cuenta?

Eric Olson: Sí, definitivamente en el caso de El Salvador, después del 1º de mayo y ahora con las jubilaciones forzadas (de jueces) en El Salvador y la Asamblea Legislativa, han creado unas condiciones de muy poca confianza entre Estados Unidos y el poder judicial y la Fiscalía de El Salvador.

Estados Unidos ha dicho claramente que la decisión de despedir al fiscal el 1º de mayo y nombrar a otro fiscal sin ningún procedimiento, sin ninguna consideración, era violentar la separación de poderes. Ellos han dicho claramente que hay poca confianza a la Fiscalía, eso lo ha dicho la encargada de negocios de la Embajada de EE.UU. en El Salvador, lo ha dicho públicamente. Así que hay muy poca confianza. En algunos casos hay más posibilidades, en el caso de Honduras, hay algunos fiscales que cuentan con cierta independencia pero son unos pocos, Luis Santos (jefe de la Unidad Fiscal Especializada contra Redes de Corrupción, UFERCO), por ejemplo, y algunos más, pero todavía siguen haciendo buen trabajo independiente de las presiones políticas que ellos también enfrentan. El problema en Guatemala y El Salvador es que la Fiscalía, en el caso de El Salvador, la Asamblea simplemente despidió a todos los fiscales con los cuales había relación, ya había confianza, así que es muy difícil pensar que puedan avanzar en algún caso cuando la Asamblea decide despedir a la gente con la cual se conoce, se ha trabajando bien, que tiene capacidad.

PC: ¿La Fuerza Anticorrupción de EE.UU. tendrá alguna incidencia en los países centroamericanos para castigar a quienes consideren corruptos?

Eric Olson: No en el sentido simplemente jurídico, porque las fiscalías de Estados Unidos no pueden presentar casos en los países, eso es una responsabilidad de las fiscalías propias de esos países. Pero habrá consecuencias en el sentido de que si hay casos que ellos presenten ante los juzgados de Estados Unidos, puede haber más sanciones en su contra. Puede haber sanciones no solo de visas, pero de cuentas bancarias, capacidad de inversión y comercio con EE.UU., hay muchas opciones ahí, pero de manera estrictamente jurídica, obviamente la Fiscalía de Estados Unidos no puede presentar un caso ante los juzgados de Guatemala.

PC: ¿Esta iniciativa de EE.UU. es una manera de llenar los vacíos que dejaron la CICIG en Guatemala y la MACCIH en Honduras en el combate a la impunidad y la corrupción?

Eric Olson: Yo creo que sí, es una forma, no es la única pero es una forma que tiene a la mano Estados Unidos dado que esas dos instancias que habían avanzado en otros casos, no continuaron por decisión de los propios gobiernos. Ellos ven este como una opción.

PC: ¿De qué servirán en la práctica estas investigaciones si EE UU no colaborará con las fiscalías locales, con lo cual estos casos no podrán ir a tribunales en los países del Triángulo Norte?

Eric Olson: Porque pueden ir a los tribunales en Estados Unidos. Pongamos persona X, alguien de alguno de los tres países, investigado por Estados Unidos, se concluye que esta persona ha estado lavando dinero, un dinero del Estado, vamos a decir así, que ese dinero se deposita en Estados Unidos, pues ante los tribunales estadounidenses se le puede congelar sus cuentas, se le puede prohibir usar cuentas en Estados Unidos, invertir, hacer comercio con Estados Unidos, hay muchas opciones, quizás no ante los tribunales de Guatemala, pero sí en EE.UU. Si esa persona quiere seguir disfrutando de una relación financiera o de inversión o de comercio con Estados Unidos será muy limitado en ese sentido.

PC: ¿Es el objetivo final de estas fuerzas de tarea construir casos penales en Estados Unidos?

Eric Olson: Es presentar casos, pero la consecuencia, si se llegara a finalizar el caso, puede ser congelar cuentas, retirar permisos, todo este tipo de cosas. Son las consecuencias, el propósito será conseguir información para presentarla ante los tribunales de Estados Unidos y avanzar jurídicamente.

PC: ¿Cómo se relaciona esto con el tema migratorio? ¿Cree que EE. UU. espere más migración o peticiones de asilo por las persecuciones políticas que inician en Guatemala, El Salvador y Honduras?

Yo creo que Estados Unidos entiende que un impulsor de la migración es la gran corrupción que existe en estos países. No hay confianza en los gobiernos, hay mucho escepticismo sobre lo que está pasando, por decir algo, en la secretaría de Salud y Educación y mucho de eso tiene que ver con la corrupción; la gente siente que no tiene opciones en su país, porque no hay medicinas, no hay vacunas, no hay empleos, no hay educación, no hay seguridad. Creo que un factor en la decisión de migrar es el nivel de corrupción que existe en los gobiernos. Porque esa corrupción debilita al Estado, debilita su capacidad de responder a las necesidades de su pueblo. Dinero robado por los corruptos es dinero que no llega a beneficiar a los más necesitados. Son los pobres y necesitados los que han tomado la decisión de migrar precisamente porque el Estado, sea guatemalteco, hondureño, salvadoreño o haitiano no resuelve sus necesidades. Así que hay una conexión bastante clara en la corrupción y la decisión por migrar.

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