Criminalización: López Pablo no pudo recuperar su libertad; lo recapturan al salir de tribunales

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Créditos: Regina Pérez.
Tiempo de lectura: 4 minutos

“En Guatemala hay un racismo extremo que llega al punto del delito de exclusión”. Ramón Cadena, jurista.

Por Regina Pérez

Eran alrededor de las 20:30 horas cuando Rudy Amílcar López Pablo, la única persona detenida el pasado 12 de octubre por daños a la estatua de José María Reina Barrios, salió de la Torre de Tribunales junto a sus abogados, después de permanecer tres días en las carceletas, aliviado y feliz porque volvería a ver a su familia. Sin embargo, cuando estaba a punto de recobrar su libertad, dos agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) informaron que lo iban a detener nuevamente por depredación a bienes culturales, mismo delito por el que se le detuvo ilegalmente la primera vez.

López Pablo fue detenido de manera ilegal el pasado 12 de agosto, según determinó la jueza Rosmery López, del Juzgado de Primera Instancia Penal de Turno, en una audiencia en la que no se permitió el ingreso de la prensa, aduciendo restricciones por la COVID-19. La misma jueza giró la orden de captura en contra de López Pablo.

Foto: Regina Pérez.

La audiencia de primera declaración, que ya se había pospuesto en al menos tres ocasiones, dio inicio alrededor de las 3 de la tarde del viernes. Durante la vista los abogados del Ministerio Público (MP) y la Procuraduría General de la Nación (PGN) llevaron la cabeza de la estatua de José María Reina Barrios, sin embalar, y una fotografía enmarcada donde se podía ver a López Pablo con la cabeza en la mano.

La abogada del acusado, Wendy López, dijo al finalizar la audiencia que la resolución de la jueza confirmó la tesis de los abogados defensores de que la detención de su defendido el pasado 12 de octubre, fue ilegal, “en la que lamentablemente las fuerzas de seguridad del Estado se prestan a obedecer órdenes ilegales, en este caso del alcalde Ricardo Quiñónez”.

La abogada señaló que bajo ese precepto, garantizando un debido proceso, la jueza declaró en un primer momento la detención ilegal en contra de López Pablo y como consecuencia de ello declaró su libertad inmediata, otorgando la falta de mérito al delito del que se le acusaba, que es depredación de bienes culturales.

Luego de su resolución, López Pablo fue llevado nuevamente a las carceletas, donde había pasado las últimas tres noches, en condiciones deplorables, como los demás privados de libertad, sin poder bañarse y durmiendo en el suelo.

Mientras tanto, los abogados defensores, Sergio Beltetón, Ronaldo Galeano y Wendy López mostraron su satisfacción con la resolución de la jueza, que también ordenó al MP investigar a quienes ordenaron y ejecutaron la detención ilegal de López Pablo.

En el semblante de López se notaba alivio y felicidad, porque finalmente podría salir de las carceletas donde estuvo detenido y podría ver a su familia. Él es un albañil Mam originario de Colotenango, Huehuetenango, por lo que tenía previsto viajar hoy.

No obstante, eso no se pudo concretar debido a que dos agentes de la División Especializada de Investigación Criminal (DEIC) notificaron a sus abogados y a López Pablo que se había emitido “una orden de aprehensión nuevamente, esta es nueva”, que iban a hacer efectiva la orden y que solo estaban cumpliendo su trabajo.

De acuerdo con la abogada, López está siendo acusado por el mismo hecho por el cual ya se le había dejado en libertad. “Lo van a juzgar por el mismo hecho y eso ya es una violación a sus derechos, porque él ya fue juzgado por ese delito”, dijo.

Hasta el cierre de esta nota, el Organismo Judicial no había informado a sus abogados si López Pablo ya fue presentado ante un juez para darle a conocer los motivos de su detención, por lo que su abogada acudirá a tribunales para verificar su situación.

Criminalización y racismo

El abogado Ramón Cadena, de la Comisión Internacional de Juristas para Centroamérica, manifestó que este es otro caso de criminalización. “Las y los manifestantes del 12 de octubre estaban defendiendo su derecho en contra del racismo que hay en el país. En Guatemala hay un racismo extremo que llega al punto del delito de exclusión”, dijo Cadena.

“La manifestación lo que estaba haciendo es defender el derecho a luchar en contra del racismo y la desigualdad, el delito se llama apartheid, que ya en la Comisión de Juristas dijimos que en Guatemala hay un sistema de apartheid de facto, no jurídico, hay muchas reglas jurídicas pero los pueblos indígenas sufren permanente y sistemáticamente de racismo, entonces en esa manifestación lo que estaban haciendo los manifestantes fue defenderse del racismo y sus derechos”, indicó.

Cadena ofreció estas declaraciones de Cadena antes de conocerse la resolución de la jueza que dejó en libertad, por unos minutos a López Pablo.

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