Por Prensa Comunitaria
José Guarcas, camarógrafo de Xolabaj Radio se encuentra retenido por 25 paramilitares, supuestos ex patrulleros y ex comisionados militares, la periodista Anastasia Mejía se encuentra en el lugar a la espera de que liberen a su compañero, también corre peligro pues está siendo intimidada y amenazada por el grupo de hombres.
Ambos están en la aldea Chiul, municipio de Cunén, Quiché, a donde habían llegado para dar cobertura a una exhumación.
La periodista Anastasia Mejía se encuentra dentro del vehículo en el que se conducían, a unos 75 metros de una “carceleta” ilegal, donde mantienen retenido a Guarcas, de 23 años. Ella está rodeada de varios hombres, quienes vigilan que no tome ni comparta imágenes desde su celular, bajo amenaza de ser retenida.
En el lugar hay otros periodistas y representantes de organizaciones de derechos humanos, que también documentarían la actividad. Autoridades Ixiles dialogaban con los ex patrulleros. Fue en ese momento cuando les dijeron que debían retirarse de inmediato. El último en retirarse fue el camarógrafo, pues tenía su equipo montado en el pedestal.
La periodista Mejía logró recoger la cámara y meterla al vehículo, pero Guarcas fue jaloneado y golpeado por los ex militares, quienes lo metieron en una “carceleta”.
Hasta el momento no se han hecho presentes ni la Policía Nacional Civil ni el Ministerio Público, ni la Procuraduría de Derechos Humanos.
Los ex militares condicionan la liberación de José Guarcas, a cambio de que se entregue a Arnulfo Oxlaj, quien asegura es sobreviviente de una masacre ocurrida en el lugar en los años 80, razón por la cual iba a realizarse los trabajos de exhumación.
La Procuraduría de los Derechos Humanos y el Ministerio Público ya tienen conocimiento del hecho.
