Por Simón Antonio Ramón*
El juez Amarildo Gilmar Barrios de León, del juzgado de primera instancia penal, narcoactividad y delitos contra el ambiente, de Nebaj, Quiché, decidió este miércoles 1 de septiembre, que Micaela Solis y Tomás Alonzo enfrenten un juicio por los delitos de sedición y atentado con agravación específica, por su presunta participación en la quema de la municipalidad de Joyabaj, en agosto de 2020.
Inicialmente Micaela Solis fue acusada por los delitos de atentado con agravación específica y sedición, pero el juez Barrios de León decidió que enfrentará juicio únicamente por el delito de sedición. En el caso de Tomás Alonzo, acusado de daño agravado de coautor y sedición, atentado con agravación específica e incendio, enfrentará juicio por daño agravado de coautor y sedición.
A criterio de Wendy López Rosales, del Bufete para Pueblos Indígenas, y abogada defensora de Micaela Solis, el Estado ha considerado como enemigos internos a las personas que manifiestan y este caso se le está tipificando de manera colectiva. “Porque esto va a sentar un precedente ya que actualmente en la coyuntura nacional que toda persona que salga a manifestar puede ser considerado un enemigo del Estado. Y se materializa esa enemistad tipificacion del delito de sedición”, dijo la abogada.
Para esta audiencia estaban citadas Micaela Solis y Tomás Alonzo y Manuel Hernández, quien falleció el 5 de julio por problemas pulmonares y padecimiento de dolor de cuerpo. Murió en su residencia ubicada en la aldea Cruz Chich de Joyabaj, Quiché.
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*Con información del Movimiento de Mujeres Indígenas Tz’ununija’.
