Por Regina Pérez
José Mardoqueo Ortiz Morales, un exintegrante de las fuerzas especiales kaibil del ejército de Guatemala, fue ligado a proceso por asesinato y delitos contra los deberes de humanidad, por su presunta participación en la masacre de 200 personas, registrada en el parcelamiento de Las Dos Erres, en la Libertad, Petén, el 7 de diciembre de 1982.
La jueza Claudette Domínguez, del Juzgado de Mayor Riesgo “A”, consideró que la Fiscalía de Derechos Humanos presentó los medios de convicción suficientes para ligar a proceso a Ortiz Morales por asesinato, en agravio de las víctimas de la masacre, así como por el delito contra los deberes de humanidad.
Ortiz Morales es un exkaibil que formó parte de las fuerzas armadas entre 1982 y 1983. En 1988 viajó a Estados Unidos y en 1990 ajustó su estatus de residente permanente legal, según información del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE).
Sin embargo, debido a que violó la Ley de Inmigración y Nacionalidad, dando declaraciones falsas sobre su participación en abusos de derechos humanos, fue condenado por un Tribunal de Maryland en 2017, a 11 meses y medio de prisión, por intentar obtener su naturalización de manera ilegal.
El acusado fue entregado por el ICE a las autoridades guatemaltecas el 7 de mayo de 2021 debido a que estaba siendo investigado por su presunta participación en la masacre de 200 personas, ocurrida en el contexto del conflicto armado.
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Antes de resolver, Domínguez leyó los nombres de todas las víctimas de la masacre, por las que se acusa a Ortiz Morales del delito de asesinato, entre las cuales figuran niñas, niños y bebés recién nacidos.
Entre los medios de convicción presentados por el Ministerio Público, que revisó la jueza, están las declaraciones de testigos, peritajes y evidencia balística.
Uno de esos medios de convicción fue la declaración de un testigo que identificó a Ortiz Morales como uno de los integrantes de la patrulla élite kaibil que ejecutó la masacre. “Sí aparece usted plenamente identificado”, indicó la jueza. Luego de ello, resolvió ligarlo a proceso por los delitos mencionados.
La jueza Domínguez también resolvió enviar a Mardoqueo Ortiz Morales a prisión preventiva que deberá guardar en la cárcel de Mariscal Zavala y dio tres meses al MP para que realice la investigación. La audiencia de etapa intermedia será el 7 de octubre de 2021.
La masacre
Días antes de la masacre, las Fuerzas Armadas Rebeldes (FAR) recuperaron 21 fusiles al ejército en una emboscada. Con el fin de recuperar esos fusiles y bajo la sospecha de que los habitantes colaboraron con la guerrilla, una patrulla élite kaibil junto a 40 soldados, incursionaron la madrugada del 7 de diciembre a la aldea, donde reunieron a hombres, mujeres y niños por separado, en la escuela e iglesia de la comunidad respectivamente.
Los integrantes de la patrulla violaron a mujeres y niñas e incluso las obligaron a prepararles comida.
Durante la tarde trasladaron a los hombres y mujeres, con los ojos vendados, a las orillas de un pozo en construcción, donde los interrogaron y torturaron, con el fin de obtener información de los 21 fusiles que días antes habían sido recuperados al ejército por parte de la guerrilla.
Luego de golpearlos en la cabeza los arrojaron al pozo y para asegurarse de que ninguno quedara vivo, les disparaban. De ese pozo fueron recuperados 162 cadáveres.
Entre otros lugares identificados donde fueron masacrados los pobladores están “la Aguada” y “los Salazares”.
El caso de la masacre de las Dos Erres fue llevado a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que en 2009 emitió una sentencia condenatoria y ordenó la investigación, con el fin de sancionar a los presuntos responsables de estos hechos.
En noviembre de 2018, Santos López Alonzo, exintegrante de la patrulla kaibil, fue condenado a 5 mil 130 años de prisión por su responsabilidad en la masacre.
Por este caso el exkaibil Gilberto Jordán, también deportado por ICE, espera el inicio de su juicio, en 2022.
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