Por Elías Oxom
Antes de la pandemia era dificil sobrevivir del arte, pero después se ha vuelto mucho más complicado, declaró Otto René Cajbón Tejaxun, de Sumpango, Sacatepéquez. El artista visual atribuyó esto al cierre de los mercados de artesanías y que no hay actividades públicas. Además, el arte no es valorado como se debe, indicó.
Cajbón Tejaxun, del pueblo maya Kaqchikel, es agricultor, instructor de dibujo, pintura y artista visual; recibió cursos libres de arte y estudió en la Escuela de Artes Plásticas, de la ciudad de Guatemala. Desde pequeño le gustó dibujar. Hacía dibujos en sus cuadernos, con crayunes y acuarelas, lo que posteriormente lo motivó a continuar la especialidad en artes visuales.
Como artista ha plasmado sus obras en Sumpango, además de trabajos individuales que le solicitan; ha hecho exposiciones internacionales, colectivas o individuales, y ha colaborado en la elaboración de murales. En éstos y en sus cuadros se enfoca principalmente en el paisajismo, las costumbres de su municipio y del país, entre otros; todas piezas únicas y originales, dijo.
Cajbón Tejaxun lamentó que en Guatemala no se de el verdadero valor al artista y sus creaciones. en lo personal ha tenido que sobrevivir como agricultor y a través de la venta de plantas naturales. “La población debe empezar a valorar el arte”, subrayó.
En Sumpango, Sacatepéquez coordinó el Tercer Festival Nacional de Murales, denominado: “Uniendo a Guatemala a través de Sumpango y sus colores”, evento que reunió a artistas de treinta pueblos, que pintaron en vivo e hicieron una exposición con el apoyo de algunos patricinadores, como el Ministerio de Cultura y Deportes, la Municipalidad de Sumpango y personas particualres. El objetivo principal fue embellecer a los pueblos y promover el turismo.
Por su parte, Abraham Petz Elías, de San Cristóbal, Totonicapán, otro artista visual, comentó que la pandemia ha afectado fuertemente la vida de los artistas, como en su caso, que tiene un Centro Cultural en el que se encuentra un museo denominado “Paseo artístico” y una galería de arte.
Petz Elías se identifica con el paisaje del altiplano, con las brumas del occidente del país. Ha hecho arte desde niño, en la escuela primaria, cuando empezó a pintar y perfeccionó su técnica durante los niveles básico y diversificado. Ha recibido el premio “Arturo Martínez”, en Quetzaltenango, donde obtuvo los tres primeros lugares y menciones honoríficas. Su arte está plasmado en los murales de San Cristóbal, Totonicapán.
