Por Lourdes Álvarez Nájera
La Alcaldía Indígena de la comunidad el Pilar II, del municipio de San Juan Sacatepéquez junto a 12 Comunidades en Resistencia de Occidente, realizaron este jueves una protesta frente a la municipalidad porque aseguraron que “con el pretexto de realizar proyectos de desarrollo se irrespetan sus derechos ancestrales como pueblos indígenas”.
Tiburcio Guamuch, alcalde indígena de el Pilar II, aseguró que se han irrespetado las formas de gobierno ancestral que las comunidades han practicado por generaciones e indicó que la municipalidad, a través de sus alcaldes auxiliares, no toma en cuenta las decisiones y acuerdos que las comunidades han alcanzado previamente sobre la gestión de su territorio o sobre la representación que quieren en sus aldeas.
“Como población indígena kaqchikel nos merecemos respeto, nos dicen que somos un puñito de personas, pero nosotros representamos también a nuestros abuelos y tatarabuelos y hemos sufrido amenazas e intimidaciones de parte de un grupo de auxiliares del señor Juan Carlos Pellecer Agustín que con sus credenciales quieren imponerse en nuestra aldea”, aseguró Guamuch.
El líder indígena aseguró que el alcalde Pellecer Agustín “no nos quiso reconocer y ellos querían administrar nuestra alcaldía indígena y hasta nuestro salón”.
Las nuevas autoridades de la alcaldía indígena de San Juan Sacatepéquez fueron confirmadas en una asamblea el 15 de enero de este año y la población les delegó el cuidado de los recursos naturales y la administración del bien común, pero las comunidades en resistencia de esa localidad han denunciado amenazas de intervención y despojo de sus territorios para establecer proyectos sin consultar a las comunidades.
“La municipalidad no tiene derecho de apropiarse de nuestros terrenos ni de imponer los proyectos, como alcaldía indígena les hacemos saber que nosotros podemos autogestionar y administrar, porque queremos mejorar, recuperar y mantener nuestras prácticas ancestrales y rechazamos los proyectos de la municipalidad porque tiene interés personal”, enfatizó.
Por su parte, otro de los pobladores que participó en la manifestación, dijo que “varios de esos alcaldes auxiliares en un inicio dijeron que se oponían a la cementera para ganarse la confianza de la población, pero luego no hicieron nada, incluso ya está por inaugurarse un puente que da paso libre a la cementera y ellos no hicieron nada”.
Otra de las inconformidades de la población maya kaqchikel es que el nombramiento de los alcaldes auxiliares “se hizo a escondidas y nadie supo dónde se realizó y ahora quieren dejar a nombre de la municipalidad las pertenencias que la comunidad ha adquirido por su propio esfuerzo”, en referencia a un terreno y un proyecto de agua potable que fue gestionado por la propia comunidad y que aseguran que ahora los alcaldes auxiliares quieren que sea administrado por la municipalidad.
“Lo que la municipalidad quiere es recibir dinero de las empresas y adquirir los impuestos para los proyectos que ellos decidan sin consultar a las propias comunidades”, aseguraron.
Se intentó obtener la información por parte de la municipalidad pero no respondieron a las llamadas telefónicas.
La Alcaldía Indígena y sus representantes solicitaron una reunión con el alcalde para el 25 de marzo debido a que hoy solo fueron atendidos por algunos síndicos.
