Por TIK LAS
Dirigentes comunitarios del Comité de Desarrollo Campesino (CODECA), anunciaron que realizarán una manifestación pacífica en San Juan Ixcoy por agravios de la empresa Energuate y por las violaciones a los derechos de usuarios y derechos humanos de la gente en donde está implicada la empresa colombiana.
Este 22 de marzo, en el municipio de San Juan Ixcoy, Huehuetenango, directivos municipales de CODECA, informaron a través de una conferencia de prensa que el miércoles 24 de marzo realizarán una manifestación pacífica para rechazar las acciones de la empresa Energuate a nivel nacional. Iniciará a las 8 de la mañana en el Caserío Chenway rumbo al Parque Central del municipio.
Con la movilización, la organización campesina busca que se garantice los individuales y colectivos de las comunidades indígenas, mestizas y xinkas afectadas por las operaciones de esta empresa, también que se garantice el derecho a organización y resistencia de las comunidades que rechazan los cobros desmedidos.
Durante la rueda de prensa, los dirigentes pidieron que el Estado y la empresa cesen con los esfuerzos de criminalizar a la población, especialmente a todas aquellas personas que se oponen a Energuate o que exigen sus derechos; también demandan la liberación de defensores y defensoras de derechos humanos que están encarcelados o enfrentando procesos penales en tribunales.
Asimismo, rechazaron la continuidad de la construcción del cableado de interconexión eléctrica que realiza la empresa Trecsa en distintas regiones del país, especialmente por los daños medioambientales que producen en el entorno la instalación de las torres de metal.
También expresaron su indignación por la condena de Ceferina Xaminez, por una jueza del departamento de Sololá. Ceferina fue condenada por una falsa acusación de la empresa Energuate a tres años de prisión por el supuesto robo de un alicate.
“Es una clara muestra de racismo y una bofetada para la justicia en este país. Es inaceptable que los grandes criminales de la política guatemalteca estén libres o solo se les impongan una pequeña multa. Y a los verdaderos defensores de derechos humanos se les encarcela o en el peor de los casos se les manda a asesinar”, afirmaron los directivos de la organización.
Paz, techo, respeto, respeto a la tierra y a nuestra gente y a todo ser vivo, fueron nuestras súplicas en la larga noche de los 500 años, hoy son nuestras demandas y exigencias, concluyó uno de los líderes presentes.
