Por Regina Pérez
Sobrevivientes del genocidio cometido contra la población maya ixil acudieron este martes 10 de febrero a la Sala de la Corte de Apelaciones de Mayor Riesgo para argumentar respecto al recurso de apelación especial presentado contra la sentencia de genocidio emitida en 2018.
Su intención es que el Tribunal de Mayor Riesgo B emita una nueva sentencia y condene al jefe de inteligencia militar José Mauricio Rodríguez, por genocidio y delitos contra los deberes de la humanidad contra el pueblo maya ixil.
De acuerdo con un comunicado del Centro por la Acción Legal de Derechos Humanos (CALDH), querellante en el caso, durante el debate por genocidio que inició en 2015 y que finalizó en 2018 con la sentencia, se acreditaron los hechos y se probó que hubo genocidio, así como la responsabilidad penal del jefe de inteligencia, Rodríguez Sánchez, sin embargo el Tribunal, por mayoría, no lo condenó.
Según CALDH también quedó demostrado que Rodríguez Sánchez cooperó con la comisión del delito, desde la preparación de los planes que condujo a la destrucción parcial la población maya ixil en los años 1982 y 1983, así como la calificación de estos como enemigos, actos sin los cuales no se habría podido cometer el genocidio y delitos contra los deberes de la humanidad.
El querellante recordó que en septiembre de 2018 la jueza Sara Yoc, parte del Tribunal, expuso durante la audiencia su voto razonado, explicando claramente la responsabilidad penal de Rodríguez Sánchez y su desacuerdo con la sentencia absolutoria. El mismo Tribunal afirmó que sí hubo genocidio.
La obligación del deber de garantía del Estado de Guatemala, debe traducirse en una justicia que genera garantías de no repetición, por lo que exigimos que la Sala de la Corte de Apelaciones declare con lugar el recurso presentado y condene al acusado, señalaron la Asociación para la Justicia y Reconciliación (AJR) y CALDH.
