Por Elías Oxom
La aldea Maya Q’eqchi’ Setzí Rax’qeen de Chisec, Alta Verapaz está conformada por 266 familias, la única entrada y salida a la cabecera municipal es una carretera de terracería que sufrió serios daños, cuando la tormenta Eta ingresó a Guatemala el cinco de noviembre 66 viviendas quedaron bajo el agua y la segunda quincena de noviembre con el paso de la depresión tropical Iota, otras 80 viviendas quedaron inundadas según datos de las autoridades comunitarias.
Durante 31 días las familias de Setzí pasaron refugiados en tres albergues ubicados en el casco urbano de Chisec, en la escuela primaria, el salón comunal y la iglesia. Sin embargo debido a la nula ayuda estatal las familias decidieron evacuar los albergues y refugiarse en casas de familiares en otras comunidades mientras los vecinos se organizan para reconstruir sus viviendas.
Mateo Mó presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE), asegura que hace 35 años la comunidad también se inundó, sin embargo opina que en esta ocasión la tierra tuvo mayor dificultad para absorber el agua y puede que esté relacionado a la deforestación que ha sufrido la región en las últimas dos décadas.
La inundación provocó la pérdida de 10 hectáreas de achiote, pimienta gorda, canela, mango y lichas, además de los cultivos de patio.Los nacimientos de agua que provocaron esta inundación son los ríos Se’ Tz’i’ y el río Se’ Raxq’een. Es una comunidad en donde se cultiva el achiote y se perdieron los cultivos que son las fuentes de ingreso de las familias.
