Estados Unidos deporta 135 niños a la semana

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Créditos: David Toro
Tiempo de lectura: 3 minutos

Por David Toro

Las deportaciones vía aérea y terrestre que Estados Unidos realiza durante la pandemia han aumentado significativamente entre agosto y octubre; hasta este viernes 6 de noviembre han arribado un total de 111 aviones con personas deportadas. La diputada Andrea Villagrán de la bancada Bien, aseguró que la medición diplomática del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex), ha sido deficiente para evitar que se vulneren los derechos de la niñez migrante que está siendo retornada a Guatemala.

Hasta el 5 de noviembre, un total de 37 mil 521 personas fueron deportadas a Guatemala desde México vía terrestre y aérea desde Estados Unidos. La cantidad de deportaciones se incrementó de manera considerable en agosto y el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) pasó de enviar 7 vuelos en junio a 14 en agosto a 27 vuelos en octubre, con un promedio de 135 menores de edad deportados semanalmente.

La diputada Villagrán realizó un análisis de esos datos sobre deportaciones basándose en información de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (SBS) y encontró que Guatemala ha recibido a 3 mil 219 niñas, niños y adolescentes no acompañados de enero a octubre de este año. Aunque Villagrán aseguró que los protocolos de atención en los albergues designados están funcionando correctamente según su último monitoreo, la deficiencia preocupante se encuentra en el cumplimiento de los procedimientos legales migratorios de la niñez que ha sido detenida en Estados Unidos.

“Están enviando a 135 niños semanales aproximadamente, porque tienen a más de 20 mil detenidos y quieren -las autoridades de Estados Unidos- descongestionar sus instalaciones; el Minex no ha generado la mejor relación diplomática para evitar que se realicen deportaciones exprés”, señaló Villagrán.

La diputada advirtió que ICE ha utilizado la pandemia como pretexto para deportar a las niñas y niños inmediatamente después de ser capturados en la frontera. “Guatemala debe verificar que se les den las garantías para buscar un estatus migratorio regular en aquel país, si es necesario según sus condiciones”, destacó.

San Marcos y Huehuetenango encabezan estadística

De los 3 mil 219 menores, 817 son niñas y 2 mil 402 son niños, el mes con mayor cantidad de menores retornados fue octubre con 547, seguido por enero, mes previo a la llegada de la COVID-19 a Guatemala, cuando 448 menores fueron enviados al país.

Los departamentos del noroccidente del país encabezan el listado de retorno, San Marcos ha recibido a 790 menores, mientras que Huehuetenango le sigue con 616 según el informe de la diputada Villagrán.

Problemas con las pruebas de COVID-19

El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (Mspas) ha realizado un total de 1 mil 622 pruebas de COVID-19 a guatemaltecos deportados durante la pandemia, de estos 330 han resultado positivos, según los registros que la autoridad de salud compartió a la bancada del partido Bienestar Nacional (Bien).

Los encargados de realizar las pruebas nos han dicho que existió mucho desorden cuando los laboratorios estaban saturados, muchos resultados se perdieron, esto pasó sobre todo durante los primeros cuatro meses de pandemia”, señaló la diputada Villagrán.

Actualmente los vuelos de deportación de Estados Unidos traen un promedio de 120 pasajeros, cuando uno de los acuerdos entre ambos gobiernos en abril para evitar mayor riesgo de contagio fue que cada avión no trajera más de 45 personas.

Hasta el 1 de noviembre, el Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) informó que se enviaba a sus casas a todos los migrantes que retornan vía aérea si pasaban las pruebas de un chequeo médico; al 5 de noviembre 100 personas retornadas vía terrestre fueron puestas en cuarentena en dos hoteles de la ciudad capital. Pero a partir del 6 al 10 de noviembre debido a los daños viales ocasionados por la tormenta Eta en Guatemala el IGM señaló que todos los deportados serán trasladados al albergue Ramiro De León Carpio, ubicado en la zona 13 de la capital, por un período de al menos una semana previo a ser enviados a sus lugares de origen.

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