Kajkoj Máximo Ba Tiul
Mientras la mayoría de la población guatemalteca está luchando entre la vida y la muerte. Nuestro país, sigue manteniendo un sistema político y económico, que sigue siendo manejado por las elites corruptas del país. Elites económicas, políticas, militares, religiosas, que se han querido adueñarse de todo, no solo de sus recursos naturales, sino de también de nuestras mentes y cuerpos, porque nos han puesto en un estadio de incapacidad para poder asumir con fuerza nuestra responsabilidad de cambiar estas relaciones de poder que son injustas.
Nuestro país, con una población mayoritariamente pobre, que vive para el día y que a pesar de estas condiciones, está enfrentando la situación generada por el COVID, casi sin apoyo gubernamental. Los apoyos que el gobierno prometió que son una millonada de quetzales, y que cargaremos por muchos años como deuda externa e interna, solo ha servido para que los mismos y correligionarios de dirigentes políticos puedan obtenerlo, así como los préstamos para la pequeña y media empresa, servirá para mantener la riqueza de los burgueses guatemaltecos, como ha sucedido con otros programas sociales de gobiernos anteriores, donde solo aprovechan políticos y burgueses-oligarcas y algunos mediadores como COCODES y líderes de organizaciones que ya saben como obtener provecho de estos programas.
Sin tomar en cuenta el sufrimiento de la gente, el pacto de corruptos, sigue haciendo estragos en el país. No olvidemos la forma abusiva y corrupta como eligieron a esta directiva del congreso, que dicho sea de paso, el MP no ha querido investigar si es cierto que el presidente tuvo que ver, comprando a diputados para que votaran por la planilla ganadora. Luego los diferentes préstamos con organismos internacionales para endeudar al país, con la excusa de mejorar la infraestructura vial y otros proyectos en el país. La distribución de las comisiones de trabajo. Se nos viene el COVID; y para financiar diferentes programas para paliarlo, aprobaron prestamos que de acuerdo a informes de la COPRECOVID, los ministerios carecen de capacidad de ejecución del financiamiento COVID. Lo que nos hace pensar que lo están guardando para distribuírselos a fin de año o hacerse regalos como lo hizo hace poco el MINISTERIO DE LA DEFENSA.
El país cuenta con grupo de políticos-mercaderes-corruptos-narcos-lavadores; un grupo de jueces corruptos y un organismo ejecutivo con componendas y negociaciones oscuras que sabe ocultarlas, como los proyectos de COVID o que se dedique a financiar construcción de carreteras, cuando lo que queremos ahora es reforzar el sistema de salud pública. Por otro lado, la Asociación Amigos del País, el Centro para la Defensa de la Constitución (CEDECON), los Bufetes de la Impunidad, por supuesto el CACIF, sobre todo quienes están ligados a estos procesos: traficantes de influencias, cooptación del Estado, financiamiento ilícito y por supuesto como operadores políticos: Felipe Alejos, alias FELIPAO y Gustavo Alejos[1].
Que apresuradamente el Congreso dirigido por un monaguillo de la corrupción y una Junta Directiva que llegó de forma anómala a dirigir el congreso, crearan la comisión pesquisidora en contra de los magistrados de la Corte de Constitucionalidad y que desobedezcan a la máxima magistratura para la defensa de la Constitución. Por otro lado, que comenzaran a aparecer nuevamente abogados vinculados con la corrupción y el bufete de la impunidad, a vomitar serpientes y escorpiones en contra de la CC. Que aquellos que piden que termine la cuarentena y el distanciamiento social, también salgan a despotricar en contra de la CC y su intención de provocar un golpe de Estado. Todo esto y más, nos deja con un sabor de que quiénes realmente quieren promover un golpe de Estado, para seguir mamando leche de la misma vaca, es la derecha y la extrema derecha, que tiene sumido en situación de vulnerabilidad a toda la población.
Son los mismos que intentan quitarle la inmunidad a la jueza Aifan, a quien le han infiltrado entre su equipo a personas que han robado información de sus casos y no cabe la menor duda que van por más, cuando la CSJ, elije a una juega que tienen entre sus méritos evitar la investigación en contra de Alvaro Arzú Irigoyen y que protegió al hijo de Jimmy Morales.
Ante todo esto, que debemos hacer. Urge un sujeto político que asuma la defensa del país y que promueva poder contra hegemónico. Un sujeto político que se manifieste “encabronado” y dispuesto a cambiar la correlación de fuerzas. No un sujeto político de “manifiestos y comunicados”. Tomar las calles, convertir las paredes en medios de comunicación, las redes sociales en medios de denuncia.
“La desobediencia es un derecho humano” y ahora es de gran utilidad, porque la lucha no solo debe hacerse desde los canales democráticos, dejar la frasecita que nos movilizamos “pacíficamente” y asumir posturas ideológicas claras, porque lo que está en juego hoy, es la “democracia y los derechos humanos”.
[1] https://twitter.com/cmiguate/status/1278127732568797185/photo/1
