Créditos: PNC
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Por David Toro

El 27 de noviembre, Juan Acelio Samayoa Cabrera, de 69 años, y ex integrante de las Patrullas de Autodefensa Civil (PAC) fue deportado de los Estados Unidos y  a su arribo a las instalacoines de la fuerza aérea fue capturado por la División Especializada en Investigación Criminal (Deic). Samayoa, es acusado de haber asesinado a dos hombres en Quiché durante el conflicto armado interno.

Juan Samayoa llegó a Estados Unidos en 1992, vivió durante 25 años en la ciudad de Providence, en Rhode Island, junto a sus hijos nacidos en Guatemala y su esposa. Pero desde 2018, el Juzgado de Primera Instancia de Quiché, giró una orden de captura en su contra, porque una mujer que se mantiene en el anonimato por seguridad, denunció al ex patrullero de haber asesinado a su padre y a su tío en la década de 1980, según publicó el portal estadounidense The Christian Science monitor el pasado 27 de noviembre de 2019.

Samayoa estaba en la mira de las autoridades estadounidenses desde antes, según la información del referido portal. En 2004, el ex Pac declaró en un tribunal de apelaciones para definir si era expulsado de territorio estadounidense. En esa ocasión  Samayoa se excusó diciendo que su actuar como paramilitar fue para frenar a la guerrilla.

15 años después de haberse excusado y de ser  postergada su deportación, la investigación de las fuerzas especiales de la Patrulla Fronteriza en conjunto con las autoridades de Guatemala, ubicaron a Samayoa como un criminal de guerra buscado en su país de origen, por lo tanto esta semana un juez federal de Boston autorizó su extradición.

El caso de Samayoa representa un caso más en el que un ex integrante de las PAC deberá enfrentar a la justicia, esta vez por delitos de asesinato, secuestro  y tortura, según información de la Policía Nacional Civil (PNC), Otros procesos abiertos contra paramilitares, que han resonado durante 2019, es el caso de violencia sexual contra 46 mujeres mayas Achi de Rabinal, Baja Verapaz. Además el año pasado el ex kaibil, Santos López Alonzo, quien también fue deportado de Estados Unidos, fue condenado a 5 mil años de prisión por el asesinato de más de 200 personas en el emblemático caso de Dos Erres.

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