Créditos: Fotografía comunitaria.
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Pueblo Nuevo, Ixcán, mayo 09 de 2017.

Señor: Jimmy Morales

Comandante General del Ejército de Guatemala

Presente:

Señor Presidente y jefe supremo de las fuerzas armadas, ¿es función del Ejército estar tocando tambores y trompetas en las fiestas comunitarias? Es una burla y una vergüenza nacional. Modernizar al Ejército no se consigue desfilando de fiesta en fiesta en las comunidades o haciendo circos de payasos con uniforme castrense. Pagamos con nuestros impuestos el salario del Ejército para que se dedique a cuidar las fronteras y a brindarnos seguridad a los ciudadanos trabajadores, honrados y honestos y no para estar haciendo payasadas en las comunidades.

En 2016, el Concejo de Padres de familia de la Escuela Primaria y el director de la institución, con prepotencia, autorizaron el ingreso del Ejército a la comunicad de Pueblo Nuevo, Ixcán, sin el consentimiento de los padres de familia ni de las autoridades comunitarias; supuestamente para pintar la fachada de la escuela primaria y para sembrar algunos arbolitos en el predio de la escuela. Sin embargo, en una asamblea de padres de familia realizada ese mismo año, se rechazó la injerencia y la intromisión del Ejército en la comunidad por las violaciones a los derechos humanos cometidos durante el Conflicto Armado Interno. Según la Comisión para el Esclarecimiento Histórico (CEH) y el proyecto de Recuperación de la Memoria Histórica (Remhi) el 98 por ciento de las violaciones a los derechos humanos fue responsabilidad directa del Ejército y del Estado de Guatemala. El 04 de mayo de 2017, en el 23o. aniversario de la comunidad de Pueblo Nuevo, e irrespetando los acuerdos de padres de familia de 2016, en los que la comunidad rechazó la presencia del Ejército, Pedro Ross y Sergio Rolando Ordoñez de la alcaldía comunitaria arbitrariamente y sin el consentimiento de la comunidad en general y de los padres de familia autorizaron la presencia y el desfile del Ejército en la caminata que realizaron los estudiantes de primaria y básico en las principales calles de la comunidad, violando de esta manera la decisión de las autoridades comunitarias, los acuerdos comunitarios y otras leyes especiales en las comunidades retornadas.

Fotografía comunitaria.

Señor Presidente, ¿cuál es la necedad o la terquedad del Ejército de ingresar constantemente a nuestra comunidad? ¿Hay alguna orden señor Presidente?, o acaso este grupúsculo de personas está interesada en el Ejército para dividir a nuestras comunidades. ¿Están recibiendo órdenes o dádivas por lo que hacen? Lamentablemente hay personas arbitrarias que brillan por su ignorancia y por su falta de memoria histórica, que venden su conciencia y traicionan la memoria de los mártires que un día lucharon para dar a sus hijos y a sus nietos un porvenir y un mejor futuro, pero que lamentablemente la guerra se los llevó injustamente. Hay personas que traicionan a su pueblo por algunas migajas. O en el peor de los casos, se arrastran y se arriman a su verdugo para sentirse seguro y protegido, porque por sí solos no se sienten seguros y se quedan esperando hasta que les caiga un poco de migajas.

Exigimos, señor Presidente, que el Ejército se ponga a cuidar la frontera con México, que se encuentra a escasos kilómetros de nuestra comunidad para brindar seguridad a la ciudadanía. Nos preocupa la necedad, la terquedad, injerencia y la intromisión del Ejército una vez más en nuestra comunidad, conociendo la realidad sociopolítica de las comunidades de Ixcán. La población está agobiada por la migración, la pobreza, la exclusión, la incompetencia, la corrupción y el abandono del Estado. Consideramos una arbitrariedad ilegal e ilegítima la presencia del Ejército. Esta no es positiva en una región que fue azotada por la violencia y el abandono del Estado históricamente. Esto solo provoca más problemas, más hostigamiento psicológico, más zozobra y más temor a la población. Finalmente, estaremos alertas y pendientes de estas acciones y vamos a dar a conocer nacional e internacionalmente cualquier hecho de violencia y hostigamiento psicológico que suceda en  nuestra comunidad o ante cualquier agresión que se pueda cometer contra nuestra población.

Somos amantes de la paz, pero tampoco aceptaremos provocaciones y hostigamiento que ponga en peligro la seguridad de nuestras familias.

Fotografía comunitaria.
Fotografía comunitaria.

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