Por: Rony Morales
Desde nuestra memoria colectiva y la resistencia ancestral, ocho comunidades vecinas llegaron a Q’eqxibal en San Juan Chamelco Alta Verapaz como una muestra de solidaridad y en defensa de la tierra ancestral q´eqchi´. Hombres y mujeres dispuestos a luchar por su libertad, a pesar de todos los riesgos, esperaron la reacción de varios elementos de la Policía Nacional Civil (PNC) que llegaron en ocho radio patrullas. La defensa era por la tierra, ya que en el territorio de Alta Verapaz, su desigual tenencia es un problema que por su magnitud y carácter estructural genera y reproduce las condiciones de pobreza de grandes sectores vulnerables indígenas y campesinos.
En estos días se dio el anuncio de un desalojo en contra de la comunidad Q’eqxibal, programado para el 25 de enero de 2017. El desalojo no se materializó ya que las familias dejaron sus viviendas y se reunieron en el patio de la iglesia, en la escuela y en lugares específicos con sus documentos, títulos de propiedad y planos generales. De esta forma esperaron de manera pacífica a la policía para detener el desalojo de 37 familias
Con su manifestación, los comunitarios q´eqchi´ piden a las autoridades que suspendan la orden de desalojo, que se deje en libertad a las dos personas encarceladas, que les quiten la causión económica de Q25 mil y que se dejen sin efecto las cinco órdenes de captura en contra de los líderes de la comunidad.
También demostraron mediante un documento la legalidad y legitimidad de sus tierras, cuya historia se remonta a más de 150 años, cuando eran mozos colonos de la familia Dieseldorff Gerstenberg. Líderes comunitarios manifestaron que la problemática existe por la presencia de terratenientes que pretenden despojarlos de sus tierras mediante denuncias falsas, como usurpación agravada y hurto agravado.
Tanto para la comunidad Q’eqxib’al y organizaciones sociales tienen documentos legales que evidencian que son dueños legítimos y legales de sus territorios. Sin embargo, según la investigación del caso, se conoce que en el Registro de Información Catastral (RIC) han incurrido en actos ilícitos, ya que la institución efectuó el levantamiento catastral y demostraron los límites con sus planos. Efectivamente el RIC tomó en cuenta la medición de la comunidad, pero la señora Ana María Yat Ramírez fue favorecida por una cantidad de 23 manzanas. Se sospecha que esta diferencia se debe a actos ilícitos del RIC para favorecer de manera irregular a una persona. Se han incurrido en violaciones a la ley para adquirir extensiones de tierra, moviendo constantemente los mojones que sirven para determinar los límites entre terrones de fincas y terrenos comunitarios.
Los representantes q´eqchi´ denuncian también que la problemática de la tierra se ha llevado constantemente ante los diferentes gobiernos de turno.
El agua y la tierra son parte vital de la vida y la convivencia de las comunidades, puesto que sin el acceso a los ríos no hay vida. Los integrantes del pueblo indígena maya q´eqchi´ de San Juan Chamelco cuidan el agua de manera primordial y comentaron que: “el agua le da vida a nuestras familias, a nuestros alimentos y a los bienes de nuestro entorno”.
También indicaron que desde hace más de 500 años, las comunidades indígenas han sobrevivido con pocas oportunidades del acceso a la educación y siguen siendo vulneradas en el cumplimiento de sus derechos, y aunque desde hace más de 20 años fueron firmados los Acuerdos de Paz se ven muy pocos avances en el cumplimiento de los derechos de los pueblos indígenas.
La lucha de los pueblos siempre ha sido proteger los bienes naturales, y hoy piden que se les consulte de manera previa si se va a llevar a cabo un proyecto, ya que la población en general y sus territorios dependen del agua y su aprovechamiento es vital para el pueblo.
