Créditos: Pedro Simón.
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Por Nelton River

En la madrugada del viernes 11 de octubre, la paz y tranquilidad de Yich K’isis se perdió de nuevo, a la 01:30 horas de la mañana se escucharon las primeras detonaciones de arma de fuego, los corresponsales de Prensa Comunitaria que viajaron con la Caravana de Solidaridad reportaron este hecho,  calcularon a 1 kilómetro de distancia del lugar en donde la caravana pernoctó estaban ocurriendo los disparos.

Estos se extendieron por momentos durante varias horas, a las 02:30 am, el riesgo para cinco corresponsales y unas doscientas personas era latente, ninguna unidad de la Policía Nacional Civil -PNC- que permanece acuartelada dentro de las instalaciones de la hidroeléctrica a unos 10 minutos de distancia llegó al lugar para brindarles protección.

La vida de las personas que integraron la caravana se puso bajo riesgo, para los comunitarios del lugar, los disparos posiblemente se realizaban desde las instalaciones de la hidroeléctrica en la finca Ixquisis a 1 kilómetro de distancia del campo de fútbol de la comunidad, en ese mismo lugar, dentro de las instalaciones de la empresa está ubicado un destacamento militar y una comisaría de la PNC que actualmente cuenta con 250 antimotines de manera fija.

De inmediato, alertamos a la Procuraduría de los Derechos Humanos -PDH-, la oficial de turno, llamó al oficial al mando de los 250 agentes de las fuerzas especiales antimotines que se encuentran por lo menos desde el mes de septiembre dentro de las instalaciones de la empresa, la versión del oficial confirma que la PNC responsabilizaría a las comunidades de los disparos, por el simple hecho de ser quienes se oponen a esta empresa, pero también señalaron a la Caravana de solidaridad de atacarlos en la madrugada con armas de fuego.

Horas más tarde los medios de comunicación empresariales sin ningún reparo publicarían la versión de la empresa, victimizandose de un supuesto ataque armado, de la supuesta quema de maquinaria por gente en oposición a sus proyectos, etc.

Solicitamos a la PDH, que coordinarán con la fuerza pública la asistencia en seguridad de las personas que integran la Caravana, quienes permanecieron en el campo de fútbol de Yich K’isis, bajo la fuerte lluvia de esa madrugada,  ahí decidieron quedarse como un espacio amplio para dormir y preparar la reunión del viernes. Los periodistas de este medio continuaron documentando los disparos que por pequeños lapsos de tiempo desaparecen.

Caravana de solidaridad con el pueblo Chuj en Yich  K’isis, San Mateo Ixtatán. Fotografía Pedro Simón.

A las 04:00 AM toda la gente que forma parte de la Caravana decidió que era necesario preparar la salida de la microrregión ante el riesgo de ser atacados de manera directa, sin tener mayor información de quien o quienes estaban generando tanto disparo que duraron hasta las primeras horas de sol.

A las 06:00 AM con el apoyo de la PDH, se logró coordinar que la PNC facilitara la salida de la Caravana de Solidaridad, garantizando la integridad y derecho de movilizarse de cada una de las personas,  a las 08:00 de la mañana retomaron la carretera por el río Espíritu de regreso a San Juan Ixcoy, los corresponsales de Prensa Comunitaria no pudieron descansar un solo minuto de esta larga madrugada, la caravana retorno a su lugar de partida, pero en el ambiente quedó la preocupación por las comunidades de la microrregión de Yich K’isis, sin garantías de seguridad ante tanta violencia generada por la hidroeléctrica.

El confuso asesinato

Durante la madrugada del 11 de octubre, al amanecer corrió la noticia sobre un vecino de la Aldea Yalanhuitz que recibió un disparo, las primeras fotografías fueron tomadas por los agentes de la PNC que llegaron al lugar, precisamente porque estan ubicados a escasos 30 metros del lugar del asesinato, luego las imágenes e información se hicieron públicas en los medios corporativos, estos sin ninguna investigación,  afirmaron que ésta persona había sido atacada por los comunitarios que se oponen a la hidroeléctrica.

Una versión similar informó uno de los oficiales de mando desde Yich K’isis a sus superiores en Huehuetenango, con total despreocupación en el informe policial responsabilizan a la oposición de la empresa de los disparos recibidos por un señor, que además era trabajador de la empresa. “Se rastrea el lugar en busca de los responsables, que según indican son parte de los inconformes con el proyecto hídrico…” refiere el informe del oficial Cabrera Sales.

Vecinos de Antonio Juan Pascual, de la Aldea  Yalanhuitz narraron que en efecto, él es simpatizante y trabajador de la empresa Energía y Renovación SA. y que la carretera por la que transitaba en la madrugada en dirección de la comisaría de la PNC a la comunidad es un camino que solo hacen uso quienes trabajan en la empresa, además de ser un punto intermedio entre el destacamento militar y la policía.

Para los vecinos existe la posibilidad que la PNC lo haya confundido con un miembro de la resistencia pacífica y por esa razón le hubieran disparado. Pero prefieren que sea una investigación del MP o el informe del INACIF el que confirme el tipo de arma utilizada y la autoría del responsable.

Porque tanta violencia en Yich K’isis este viernes

La presencia de las autoridades comunitarias de otros municipios, la verificación de los hechos ocurridos el día 9 de octubre por parte de la Fiscalía de Defensores de Derechos Humanos del MP el día jueves 10 de octubre y la recopilación periodística de otras violaciones a los derechos humanos incomodó a las autoridades policiales, también incomodó a los operadores de la empresa.

La actividad de solidaridad con el pueblo Chuj que llega a la microrregión de Yich K’isis, con unas doscientas personas que viajaron desde San Juan Ixcoy, Santa Eulalia y San Mateo Ixtatán, acompañados por la prensa para verificar la situación de derechos humanos de las comunidades en resistencia pacífica en Yich K’isis, no representa ningún riesgo, ni peligro para ninguna persona, autoridad policial, mucho menos para la empresa.

Durante el encuentro distintas personas de las comunidades de la microrregión dieron sus testimonios de cómo fueron violentados sus derechos no solo desde la llegada de la empresa, sino en los últimos días, como ocurrió el 9 de octubre cuando la fuerza antimotines bloqueó dos entradas de la microrregión, ocupó los campamentos del a resistencia pacífica y luego los reprimió con gases lacrimógenos.

El encuentro se realizó en el campo de fútbol de Yich Kísis, ahí compartieron sus alimentos, al mismo tiempo nuestro equipo periodístico documento el desarrollo de esta Caravana de solidaridad.

Pero en la madrugada todo cambió y se instauró un ambiente de riesgo para la población, para los defensores de derechos humanos y para los periodistas, incluso los 330 agentes de la seguridad del Estado que permanecen en el lugar, nada hicieron por protegerlos.

Prensa Comunitaria formó parte de esta caravana y cinco corresponsales acompañaron todo el recorrido, fueron testigos de cómo comenzaron a escucharse los disparos a lo largo de la madrugada hasta que amaneció. La situación de quienes integran esta caravana fue grave durante las primeras horas del día, lo mismo para la comunidad de Yich K’isis.

El miedo y la preocupación se apoderaron de hombres y mujeres Chuj y Q’anjob’al que llegaron en la Caravana, la violencia de los discursos de la empresa que fueron publicados casi de manera simultánea con la llegada de la Caravana predijeron que una tragedia podría ocurrir.

Las publicaciones en varios medios de comunicación corporativos distan de lo ocurrido, pero se acercan a la versión de la empresa Energía y Renovación SA-PDHSA, el mismo contenido en los comunicados de las estructuras aliadas a estos proyectos hidroeléctricos, el espacio autodenominado Diálogo, el grupo Trece Democracia, el grupo 23 Comunidades, creados y dirigidos por el Consorcio por la Paz, el Desarrollo y la Cultura, el cual está conformado por la Fundación Tecnológica para el Desarrollo de Guatemala -FUNTEDEGUA- y la empresa Acuerdos y Soluciones S.A. -AYSSA-, aprovecharon para atacar a las comunidades en resistencia.

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